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En los países de primer mundo el promedio de pacientes que son infectados durante una estancia hospitalaria es el 7%, aproximadamente.
En países como México, dicho porcentaje sube entre un 10 y 12%, afirmó Manuel de Jesús López Castro, jefe de Epidemiología del Hospital General de Obregón.
En el Día Mundial del Lavado de Manos, autoridades del sector salud realizaron una serie de eventos para llamar la atención sobre esta práctica que suele ser decisiva entre una vida sana o la enfermedad.
Con un buen lavado de manos, se evita hasta el 80% de las infecciones que adquieren pacientes durante su estancia hospitalaria, advirtió López Castro.
Por ello es obligación del personal médico hacerse un buen lavado de manos antes de recibir a un paciente y después de atenderlo, cuando se va a participar en una cirugía y después de ella, o si se tiene contacto con fluidos del paciente, recalcó.
El alcohol gel es el desinfectante más conocido pero es más importante que el lavado de manos con agua y jabón o con gel sea el correcto, es decir, que se realice cuando menos en cinco partes, desde el frotarse las manos con el gel, pasarlo por las palmas, entre los dedos y uñas y hacer frotamientos giratorios con las yemas de los dedos.
En la vida doméstica, añadió, este lavado debe hacerse cuando menos antes y después de cada comida, así como después de ir al baño.
