HERMOSILLO.- La Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Sonora enfrenta problemas de pasivos laborales, nómina abultada y un estilo de trabajo carente de autoestima hacia el interior, pues le hace falta identidad.
Este diagnóstico fue hecho por Guillermo Noriega Esparza, aspirante a la presidencia de la CEDH.
Reconoció que pese a no ser abogado de profesión, es un luchador incasable del bien común y la defensa de los derechos humanos, prueba de ello es el trabajo realizado en beneficio de la salud de miles de sonorenses al crear “La Rebelión de los Enfermos”, campaña a favor del derecho a la salud y en contra de la discriminación en el acceso a los servicios médicos que realizaba el Isssteson.
“He sido el único de los aspirantes que ha llevado casos a la Suprema Corte de Justicia de este país y los he ganado a favor de los sonorenses. El hecho de que no seas abogado significa a lo mejor que no puedes tramitar un divorcio, a hacer digamos lo técnico, pero no quiere decir que no puedas hacer un equipo legal”, enfatizó.
“Toda crisis es una oportunidad. Hoy debemos hacer lo correcto, hay que inmenizar a las personas que fueron despedida injustificadamente, pero debemos de dialogar, también hay que llegar, conocer y trabajar en favor de los sonorenses y la institución”, aseguró.
Sobre las especulaciones que señalan tiene el respaldo del gobierno para lograr su elección, aseguró que el camino no ha sido fácil y que este anhelo lo viene visualizando desde años atrás, prueba de ello es la buena relación con muchos actores políticos, de distintas fuerzas, sin color, ni credos .
“Me ha costado con hechos y esfuerzo llegar a donde estoy, no es un interés mal sano partidista, no estoy en busca del poder político sino de una transformación cultural en Derechos Humanos que beneficien al ciudadano”, finalizó.