Ante la posibilidad de una alternancia política en la Federación que los dejaría "volando", los integrantes del Movimiento Ciudadano por el Agua (MCA) tratan de resurgir y dicen que de nuevo van a defender el agua, afirmó Guadalupe Flores Maldonado.
El vocero de la autoridad tradicional de Loma de Bácum señaló que la etnia retomará la defensa del agua pero no con fines políticos sino para hacer cumplir el derecho de los yaquis al 50% de las aguas del río, tal como lo establece el decreto presidencial emitido por Lázaro Cárdenas.
Los del MCA, agregó, tuvieron ganada la lucha pero no insistieron porque el gobierno los compró con dádivas.
A unos les dieron dinero, puestos en el Gobierno del Estado y en otras instancias públicas, sostuvo.
"Vuelven con la misma cantaleta, que ahora sí van a defender el agua", pero cuando pudieron ganar "les faltó valor, pero sobre todo les faltó dignidad y vergüenza para defender lo que debían defender", añadió.
Flores Maldonado refirió también que el gasoducto ya está abandonado por la propia empresa constructora y que si ésta intenta volver de nuevo a Loma de Bácum se le confiscarán los automóviles y maquinaria que introduzcan en este territorio.
Juicio por alta traición
Por otra parte, Martín Valencia, secretario del gobierno tradicional de la Loma de Bácum, destacó que se emprenderá un juicio contra los yaquis que se aliaron a la empresa constructora del gasoducto.
"Es un juicio por alta traición, de acuerdo con los reglamentos que establece la tradición yaqui".
Se emprende un juicio tradicional dictaado por el reglamento de la tribu yaqui para quienes son culpables de alta traición.
Es alta traición por haberse aliado con el eterno enemigo, además por querer cambiar nuestro sistema interno.
"Nos oponemos a este cambio porque es un legado que tiene mejores resultados que el de las autoridades civiles".