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No, Ariel Gándara Toledo no prometió terminar en 30 días con la ola de violencia criminal que golpea a Cajeme.
El aspirante a Fiscal General de Sonora precisó que en ese lapso analizaría todas las carpetas de investigación sobre la delincuencia organizada que actúa en Cajeme y a partir de allí implementaría una estrategia para enfrentar con éxito esta problemática.
Y reitera su confianza en lograr una disminución importante de la violencia e inseguridad que aquejan a la mayor parte del Estado.
Abogado con especialidad en criminalística, director de Sistemas de Información y Política Criminal y actualmente Vicefiscal, Gándara es uno de los candidatos más fuertes para ocupar el cargo de Fiscal del Estado.
Su objetivo, dice, es retomar el rumbo de la Fiscalía, "que sea una verdadera procuradora de justicia, como lo demanda la sociedad".
Para enfrentar el problema número uno de Sonora, la violencia de grupos delictivos, "se necesita un trabajo de inteligencia, acopiar información que permita una estrategia adecuada para enfrentar a esos grupos", comenta Gándara.
No se trata sólo de enfrentar a criminales, también debe sancionarse a los funcionarios que no han cumplido con su deber de detener a los delincuentes.
"Si un comandante tiene la orden de detener a un presunto delincuente y no lo hace, el comandante debe ser sancionado porque no cumplie con su obligación".
Sobre las controversias en torno al Nuevo Sistema de Justicia Penal (NSJP) considera que éste no es la causa de los males que denuncia el ciudadano cuando señala que los delincuentes andan libres e impunes:
"Es díficil que el NSJP influya porque la delincuencia organizada está en otro proceso más alto y más profundo como lo son una etapa de investigación y otra probatoria".
Tal vez la delincuencia menor está siendo beneficiada por una mala aplicación de los acuerdos preparatorios, añade.
Ante esto, su propuesta es crear consejos ciudadanos con personas que han sido víctimas de la delincuencia menor y que se arrepiniteron de firmar acuerdos preparatorios.
El NSJP es una máquina con un engranaje grandísimo, si la delincuencia está desborada no es problema del NSJP sino de factores múltiples, reitera.
