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La proximidad de la Fase 3 de la pandemia por coronavirus tiene a sus primeras víctimas económicas en los comerciantes ambulantes cuyas ventas se reducen de manera considerable.
Aunque ellos venden productos esenciales, como las papas y las sandías de este tianguero, la competencia de los grandes supermercados, que no han cerrado ni una hora, y de los Oxxos, hace mucho más difícil la situación casi insostenible de los pequeños comerciantes.
El tianguis de las calles Michoacán y Jesús García, tradicionalmente uno de los más concurridos, se miraba casi desierto esta mañana de domingo. Igual en el de la calle 300, los vendedores veían pasar a los pocos visitantes que iban más de mirones que a comprar.
A estos comerciantes como a los vendedores ambulantes de todo tipo de productos deben dirigirse antes que a nadie los apoyos económicos del gobierno federal.
