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Las organizaciones de la sociedad civil (OSC) que aplican programas asistenciales no tienen por qué preocuparse ante la reforma al Impuesto Sobre la Renta (ISR) aprobada en la Cámara de Diputados, aseguró Javier Lamarque cano.
Este reforma no restringe sus actividades ni el monto de recursos que puedan obtener de un patrocinador, puntualizó el diputado federal por Cajeme.
El objetivo, dijo, es frenar el lavado de dinero y evasión fiscal que se realizan a través de muchas organizaciones sociales, no todas pero sí en una gran cantidad.
Lamarque Cano explicó que la reforma limita el monto de los recursos que puede obtener una OSC a través de actividades diferentes a su estatus legal, recursos que no pueden exceder más del 50% de los ingresos.
Algunas OSC fueron creadas precisamente para generar ingresos y gozar de las exenciones fiscales que no tendrían como empresas y en un momento dado la actividad lucrativa es más importante que los recursos obtenidos a través de patrocinadores.
Esto ha facilitado la evasión de miles de millones de pesos por actividades empresariales cobijadas bajo la figura legal de una OSC.
En resumen, no se restringen las acitividades de las donatarias autorizadas ni se atenta contra su derecho de financiamiento y autonomía, sólo se impide que sean utilizadas para la evasión fiscal, concluyó Lamarque.
