A pesar del fuerte daño que causa a la salud, la gran contaminación y afectaciones a la materia orgánica del suelo, productores irresponsables mantienen las quemas de paja de maíz.
Juan Manuel Cortez Jiménez, investigador y especialista de Agricultura de Conservación y Suelos del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuaria, Inifap ciudad Obregón, dijo que es una lástima lo que sucede en el valle del Yaqui.
Se queman aproximadamente 15 ton/ha de paja, que podrían incorporarse para mejorar el suelo. Las emisiones de contaminantes deben eliminarse, no sólo por el tema del cambio climático, también por el impacto en la salud de la población, expresó.