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Tras el comentario hecho por el gobernador Alfonso Durazo Montaño respecto a la necesidad de construir una planta desaladora para resolver el proble a de la escasez de agua en Hermosillo, especialistas rechazaron que ésta opción sea una alternativa viable.
La estrategia de la instalación de una planta desalinizadora no será benéfico para la localidad a largo plazo debido a los costos que representaría para los consumidores, coincidieron participantes en un foro sobre la crisis del agua realizado en la capital del Estado por la organizacion Hermosillo ¿Cómo Vamos?
Las acciones prioritarias, dijeron, son la reducción de pérdidas y consumos innecesarios, el aumento de la medición y de las eficiencias, y el cobro equitativo y justo del servicio.
Para revertir el serio problema de abasto y suministro de agua en Hermosillo, se requiere pasar de un consumo de 400 litros de agua por persona al día a 200 litros, lo que reduciría el alto consumo de agua de pozos, cuencas y acuíferos.
Mientras tanto en Cd. Obregón integrantes del Movimiento Ciudadano por el Agua manifestaron que el encendido de una tercera bomba en el Acueducto Independencia contradice el discurso del gobernador Alfonso Durazo quien ha admitido que la sequía que se padece pone en evidencia que el Acueducto no resuelve la falta de agua, ni es la solución.
Mencionaron la propuesta del Gobernador de pensar en la desalación de agua de mar como la alternativa para la falta de agua en Sonora y su reconocimiento a la incertidumbre jurídica (ilegalidad) en que se encuentra el acueducto y que se sujetaría a lo que se resuelva en los tribunales.
