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Hasta hoy un total de 410 mil 239 aves han sido eliminadas en Cajeme para evitar la propagación de influenza aviar en las granjas avícolas, según un reporte del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
En este municipio operan 110 granjas que representan el 88% del total de granjas en Sonora.
De esta cantidad, sólo 4 granjas han registrado brotes de la enfermedad. Una granja de reproductoras pesadas (el 3 de noviembre), y tres de postura comercial (3, 10 y 13 de noviembre).
Las estrategias para combatir el crecimiento de la epidemia no se reduce al sacrificio de las aves que pueblan una granja y a la vacunación.
También se ha puesto en cuarentena la movilización de aves y subproductos como gallinaza y polinaza en todo el Estado.
Otra medida adoptada en Sonora ha sido la suspensión de las reuniones de la Asociación de Patólogos y Zootecnistas Avícolas del Noroeste (Apyzan). El objetivo es evitar riesgos mínimos como el que supone la transmisión del virus a través del contacto directo de técnicos que laboran en las granjas. Una medida extrema pero necesaria, comenta un miembro de Apyzan, asociación nacida fundada hace casi 60 años y pionera de este tipo de organizaciones en el país.
Esta semana inicia vacunación
Para hacer frente al brote de influenza aviar, Senasica y la Unión Nacional de Avicultores (UNA) anunciaron que antes de que concluya la presente semana iniciará la vacunación de aves, a fin de minimizar el impacto en las unidades de producción avícola (UPA).
La vacunación contempla en la primera etapa inmunizar a las aves ubicadas en zonas de alto riesgo zoosanitario y proteger a las gallinas progenitoras y reproductoras, ya que son el origen de la cadena productiva, pues son las madres de los pollos de engorda y las pollitas que ponen huevo.
La UNA, como organismo que representa a la mayoría de los productores avícolas de México, junto con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural trabajan para mantener el abasto regular de carne de pollo y huevo al mercado nacional, el cual, hasta el momento, no se ha visto afectado.
Los representantes del Senasica y de la industria avícola, coincidieron en que el brote no significa un riesgo para la salud pública, pues los organismos internacionales no reportan evidencia de que alguna persona se haya infectado por influenza aviar después de consumir alimentos avícolas como huevo o pollo.
