El sexenio de Andrés Manuel López Obrador prácticamente ha concluido. Es momento de hacer una evaluación general de un gobierno que tuvo grandes aciertos, decisiones controvertidas y errores inobjetables magnificados por sus opositores.
Apoyo a los más pobres
Tal vez el acierto más importante, bandera de su estilo personal de gobernar, es el apoyo que se otorgó como nunca antes a la población más humilde de México. En un país donde poco más de la tercera parte de las personas viven en pobreza y extrema pobreza (36%, según Coneval) es admirable el esfuerzo hecho por asegurar el sustento mínimo a los que poco o nada tienen.
Entre los programas destinados a ese objetivo destaca la tarjeta de Bienestar que asegura 100 pesos diarios a cada adulto mayor, un alivio para las penurias cotidianas de los más pobres. Tal vez un clasemediero no le conceda gran importancia a esa cantidad, pero cuando se otorga a millones que viven sin tener asegurada la comida de cada día, el impacto cambia radicalmente, más aún si se trata de parejas que viven en extrema pobreza y donde el apoyo suma 200 pesos diarios.
Súmese el apoyo económico que por primera vez se otorga a los discapacitados, una cantidad simbólica pero de perfil humanista, solidario.
Estabilidad económica
Hasta ahora. Es impredecible que ocurrirá un día de éstos si hay una sacudida a la economía internacional como la provocada por la pandemia o en los mercados financieros gobernados por élites trasnacionales, además de otras circunstancias como los precios de materias primas y los vaivenes del gobierno en Estados Unidos.
Sostener una estabilidad económica en medio de circunstancias sobre las que no se tiene control, ha sido un logro de la administración que preside AMLO, a quien auguraban un pésimo manejo en este terreno por tratarse de "un populista". Si bien no estamos en jauja, el final del sexenio ha sido mucho mejor que el de los ocho sexenios anteriores, desde 1976 hasta el 2018.
Por si fuera poco, alrededor de 9.5 millones de personas, dato oficial, salieron de la pobreza.
Los más felices, por supuesto, no somos los ciudadanos comunes, usted y yo, sino los banqueros nacionales y extranjeros que obtuvieron este sexenio ganancias como nunca antes, un récord de utilidades, según lo expuso AMLO en su sexto informe.
Democracia electoral
"Dictador" es un término recurrente utilizado por opositores y amlofóbicos cuando se refieren al Presidente. Sin embargo ni ellos podrán negar que durante este sexenio hemos tenido las elecciones locales y federales menos impugnadas a la hora de los resultados oficiales.
Se respetó la voluntad popular expresada en las urnas.
Sin embargo, la sombra de la delincuencia organizada y los crímenes de candidatos amenazan no sólo al sistema electoral sino a todo el sistema político y a la paz social.
Lo que sigue
Por supuesto que hubo más aciertos, unos grandes otros no tanto, en la administración de AMLO. Ahora sólo hemos señalado los más importantes porque mencionar todos sería tan aburrido como un informe de gobierno.
En la parte siguiente, haremos el recuento de las controversias más significativas y al final señalaremos los errores más impactantes del sexenio.
Vamos por partes.