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Una vez más el alcalde Javier Lamarque aseguró que no piensa en la candidatura para ser gobernador de Sonora.
"Ya he dicho que no está en mis planes", dijo y enseguida aclaró que no es pitoniso para saber lo que pasará en el futuro. Para reforzar esta idea acudió, como también lo ha hecho en otras ocasiones, a la cita de un clásico de la filosofía:
"Como Heráclito decía, el señor cuyo oráculo está en Delfos no oculta ni dice verdades, sólo hace señales".
Y tras equipararse al señor de Delfos, envió una señal capulinesca:
"Como Capulina, no sé, tal vez, puede ser, quién sabe, ya veremos, por lo pronto ahí estamos".
En rueda de prensa, se le dio a Lamarque la pauta para que se comparara con el alcalde de Hermosillo, Antonio Astiazarán, quien empieza a promoverse como candidato a gobernador destacando las ventajas su municipio.
Yo no voy a entrar en comparaciones, afirmó el cajemense y enseguida comparó:
"Si de presumir se trata, Cajeme está muy por encima de Hermosillo en calidad de agua potable, y no se han incrementado las tarifas de agua potable como en Hermosillo".
Complementó con los resultados de encuestas:
"Cajeme según Mitofsky encabeza el renglón de calidad de vida en Sonora, es el número uno también en limpieza de mercados municipales, además es el municipio con menos robos en domicilio, menos fraudes, menos extorsión, menos conflictos familiares y vecinales, en el entorno laboral y escolar, y con menos conflictos de la ciudadanía con su gobierno".
Y reiteró:
"Yo no voy a estar entrando en comparaciones, que sea la ciudadanía la que decida, yo seguiré trabajando por Cajeme".
