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Lucía tiene 27 años, es ingeniera y desde hace más de tres años tiene un trabajo que le gusta y en el que puede crecer. Hace un par de años compró una casa y es económicamente independiente.
Su novio Elías, con el que lleva tres años, apenas terminó de estudiar una licenciatura y aún no sabe en qué quiere trabajar.
Lucía ya está pensando en hacer una maestría, formar una familia, o las dos cosas. Quiere dar un siguiente paso importante en su vida, pero Elías no parece estar en la misma sintonía, él cree que aún le faltan muchas otras cosas por hacer antes que pensar en eso, prefiere salir con sus amigos y no quiere más responsabilidades.
Cualquier parecido con la realidad no es mera coincidencia; la historia de "Lucía" y "Elías" -una historia verdadera, con nombres ficticios- se está replicando cada vez con mayor frecuencia.
Para Jessica Grose, editora de la revista electrónica Slate, Elías es un típico "macho omega". Así es como denominó a los hombres que son adolescentes perpetuos, tienen trabajos inestables y prefieren jugar videojuegos y beber con sus amigos que asumir un compromiso de la magnitud del matrimonio.
La firma de comunicación y marketing JWT cree que en la actualidad este es uno de los factores determinantes para que las mujeres vean al matrimonio solo como una opción y ya no como un fin. "¿Por qué comprometer una próspera carrera o la libertad personal para tener hijos con uno de estos personajes?", se preguntan en su informe sobre tendencias de 2012.
Omega Pop
Llamamos macho alpha a aquellos hombres que buscan dominar, son líderes; un macho beta es aquel que sigue al alpha, alguien que solamente va por la vida; y aquí es donde aparece el macho ‘omega’, aquel hombre que simplemente se dio por vencido, es un eterno adolescente, tiene un trabajo tambaleante y prefiere jugar videojuegos y estar con sus amigos antes de tener algún compromiso.
Este tipo de hombres ha sido representado en la cultura pop en personajes de series y películas recientes. El ejemplo más claro puede ser Ben Stone, el personaje que interpreta Seth Rogen en la película Ligeramente Embarazada (Knocked Up), un hombre de 24 años que comparte una casa con sus amigos con los que "trabaja" desarrollando una página de Internet. Después de una aventura de una noche con una mujer, esta queda embarazada y deciden hacerse cargo del bebé, pero lidiar con él es como lidiar con un niño y el bebé que viene en camino. Stone tendrá que crecer antes de poder criar a un bebé.
Casi cualquier personaje hombre en las películas del director Judd Apattow encaja con este perfil: Virgen a los 40, Funny People, Step Brothers, etcétera.
Matrimonio a la mexicana
Según Martha Treviño Cavazos, psicóloga general especialista en violencia familiar y problemas de comunicación en la pareja, el fenómeno que se está presentando es que el matrimonio sí está llegando más tarde, pero aún así su durabilidad es menor.
“No necesariamente el hecho de casarte más grande significa que estás más maduro emocionalmente”. El que las mujeres estén aplazando el matrimonio no significa que vayan a tener mejores relaciones, pues la edad no determina el grado de madurez.
Pero también se da el caso, cuando se conjuntan las condiciones idóneas como el haber vivido ya las experiencias que se deseaban y estar listos para el compromiso, entonces puede haber mejores relaciones.
“Aquellos que sí están listos para comprometerse tienen una muy buena relación, están comprendiendo a la mujer y están comprometiéndose en la familia, porque hay muchísimos que están junto con la mujer, los dos trabajan o los dos cuidan a la familia”.
Lo cierto es que la dinámica familiar de los mexicanos está cambiando y debe adaptarse a las condiciones de vida actuales y llegar a un punto idóneo en que funcione para los involucrados.
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