Tiene ocho años, pero su imaginación es mayor.

Por algo fue el segundo lugar del Certamen Estatal de Fomento a la Lectura.

A través de la Biblioteca Ponguinguiola y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) se realizó este concurso entre niños de las primarias de Sonora.

En Obregón, Romina Castro Calvo, del segundo año del Instituto IODI, obtuvo el segundo lugar del concurso de dibujos en cartel “Cómo imaginas el futuro”.

Para Romina, este mundo debe forjarse “Un futuro con alas de mariposa”.

Y así lo plasmó con diversos colores. Su trabajo recibió un premio por el segundo lugar y ella misma se encargó de recibirlo recientemente en Hermosillo.

Al lado de sus padres, Lorenia Calvo y Jair Castro Rivera, la niña se ha distinguido desde pequeña por su mente despierta.

Incluso es una buena oradora, como lo ha demostrado ya en algunas ocasiones, una de las cuales fue ante el hoy gobernador del Estado, Guillermo Padrés Elías, cuando era candidato.

En las oficinas de la Unión General Obrero, Campesina y Popular (Ugocp), ella pidió:

“Queremos decirles que desde niños soñamos vivir seguros, sin miedo, con educación y con oportunidades para nuestras familias y queremos desde hoy luchar por nuestro futuro y querer más a Sonora”.

Y fue más allá en esa ocasión: “Perder nuestro futuro no es como perder unas elecciones Memo. Necesitamos un cambio urgente, créanme, las generaciones por venir agradecerán todos nuestros esfuerzos”.

Con mucha claridad, le señaló el apremio de la mayoría de los ciudadanos:

“Yo soy solo una niña que está aprendiendo a vivir y que les pide que actuemos. Mi hermanito de casi dos años y muchos niños más merecen oportunidades.

“Todos los niños estamos hambrientos de amor, de paz, de justicia y algunos, muchos más no tienen ni qué comer. Pensemos en ellos, en nosotros, en ustedes”.

Y remató:

“Yo soy solo una niña que quiere un Sonora mejor”.

El aplauso de todos, Padrés Elías incluido, no se hizo esperar.

Ahora, Romina se siente orgullosa de haber sido premiada por su dibujo.

Y, como una niña muy madura, refrenda:

“Todos los niños deseamos un mundo libre como las mariposas. Libre de pobreza, de injusticias, de desigualdades. Eso es lo que mis padres me han enseñado y lo creo firmemente”.