El aire acondicionado en las aulas de las escuelas públicas pasó de ser un lijo a un elemento indispensable.
Antes todos los niños estaban acostumbrados a sudar la gota gorda sobre el mesabanco mientras la maestra explicaba y se refrescaba con un abanico de cartón.
Pero de unos años a la fecha empezó la instalación de unidades de aire acondicionado en escuelas públicas, y ahora los padres de familia exigen este servicio.
Y cuando no se puede, cierran la escuela a manera de protesta, tal es el caso de la primaria "Abelardo L. Rodríguez" de esta ciudad.
Los papás y las mamás decidieron cerrar la escuela porque el plantel carece de condiciones para instalar unidades de aire acondicionado. Afirman alarmados que sus hijos sudan mucho y puede deshidratarse.
¿No recuerdan ellos y ellas que en su infancia la mayoría de los niños en las escuelas públicas estudiaban sin aire acondicionado?
La escuela cerrada, los niños sin clases y los maestros sin trabajar. Todos felices.