• Qué lástima, y yo que creí que México ya había superado aquella lamentable etapa de asesinar a sus candidatos: Luis Donaldo Colosio Riojas.
• Elecciones 4 de julio; peligra el PRI en Sinaloa e Hidalgo.

Desde el primer momento que me enteré del asesinato del ahora ex candidato del PRI al gobierno de Tamaulipas, Rodolfo Torre Cantú, se me vino a la mente, por asociación de ideas, ese otro asesinatocometido 16 años atrás en perjuicio de Luis Donaldo Colosio en los momentos en que, por el PRI, también, buscaba alcanzar la presidencia de la república. Esa misma asociación de ideas me llevó a la conclusión de que, por más que ambos murieron asesinados, hay una abismal diferencia entre un caso y el otro.

Baste recordar que el sonorense llega a la candidatura del PRI en condiciones que aun siguen sin entenderse del todo. Apartadas, por completo a los usos y costumbres del sistema que vio su caída ( yo diría que momentánea caída, porque no dudo en que habrá de regresar este próximo julio del 2012 ) seis años después. Para nadie era un secreto que Colosio no llegó con toda la fuerza y el aval del Estado representado en esos momentos por Carlos Salinas de Gortari, el hombre que no obstante haber llegado bajo la sombra de la ilegalidad, pudo llegar a revertir el desliz para convertirse en uno de los presidentes con más poder en la historia política de nuestros días. A tal grado que él mismo tuvo que tomar el micrófono para reforzar la endeble candidatura de Luis Donaldo cuando ante los ojos de la república coqueteó con retirarlo como candidato; “ No se hagan bolas, el candidato es Luis Donaldo”, tronó la diabólica vocecilla de Salinas, sin  convencer a nadie pues para nadie era un secreto que su corazón y sus intenciones se inclinaban más hacia el entonces jefe de gobierno capitalino Manuel Camacho Solís a quien meses después del destape del sonorense lo elevaría a canciller de la república, otra designación que tampoco habría de convencer ni al mismo Salinas. La espada de Demócles seguía pendiendo sobre la cabeza de Luis Donaldo, en esa misma en la que finalmente se estrelló la bala que aunque disparada por Mario Aburto, fue hábilmente manipulada por los asesinos intelectuales, esos mismos demonios que aun siguen prófugos y con los que se completaría la docena trágica; los seis de Salinas y los subsecuentes seis de Zedillo, el candidato substituto que con su gris actuación terminó entregando el poder al PAN de Vicente Fox, de Fernández de Cevallos, al PAN de Salinas y Elba Esther Gordillo.

Curiosamente es en ese momento de reflexión con el que, por días coquetea el columnista antes de decidirse por el tema a abordar que me encuentro con la frase que encabeza estos apuntes y que confirma mi sospecha en relación a la gran diferencia que existen entre un crimen y otro; entre un crimen de Estado, para acabar luego, el del magnicidio, pues y este otro con tintes absolutamente gangsteriles por más similitudes que existen entre uno y otro.

La frase es de Luis Donaldo Colosio Riojas, hijo del malogrado Luis Donaldo Colosio Murrieta y lo dice todo. Es el remate, por cierto, con el que Colosio Riojas cierra su artículo en el que aborda y recrea el crimen que lo sentenció a la doble orfandad; la de padre y de la democracia. Porque en México, dieciséis años después, seguimos en las mismas; siendo el “ ya merito”, para estar acorde a las aspiraciones de la selección, huérfana, por cierto, en estos momentos, tras la graciosa huida del  vasco Aguirre. Y aunque en ambos casos la intención, el propósito es el mismo, desestabilizar la poco armonía que podía quedar en México luego del batidillo que han sido los cinco años de gobierno de Calderón, queda ese otro sin sabor que deja el saber que Luis Donaldo fue víctima del llamado “ fuego amigo”, pues a nadie convencen con su cuento de “ asesino solitario”. En el caso de Rodolfo Torre Cantú no hay mucha vuelta de hoja; es un  ajuste de cuentas, si, pero no como el que acaba de darse ayer aquí en Sonora entre polleros y narcos, con un indefinido saldo que va de los diez a los veinte muertos, sino entre miembros del crimen organizado y su abierto enemigo, el gobierno de la república.

FIERRITOS EN LA LUMBRE

El que parece andar en campaña y sin que haya candidatura de por medio es el ex alcalde Adalberto Rosas López, a quien finalmente terminarán por hacer mártir y perfilándolo con rumbo a la alcaldía, de nuevo, o una diputación local, de seguir exhibiéndolo como la cabeza visible de todo cuanto huela a oposición del acueducto el Novillo. Y a todo esto?, de veras, sabrán en Granados y en la parte alta de la sierra de que en Cajeme, entre miles y miles de opositores al plan Sonora, si, hay uno al que apodan el pelón y que, de veras, es el bueno de la película?. Y a propósito de comicios, consultados que han sido, vía Internet los brujos de Catemaco, todo parece indicar que el PRI se alzará con las victorias, este próximo domingo cuatro de julio, en los casos de Veracruz, Durango, Aguascalientes, Zacatecas ( hoy en manos del PRD ) Chihuahua, Tlaxcala, Tamaulipas y Quinta Roo. En el suspenso, y casi un hecho que sus casos se irán a los altos tribunales electorales, las elecciones en Hidalgo, Oaxaca y Sinaloa, estado éste último en donde hasta ayer, PAN ( Mario López Valdez ) y PRI, ( Jesús Vizcarra Calderón ) cerraron campañas con un duro empate técnico que no augura nada bueno para nadie.

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