La incertidumbre se ha apoderado del sector transportista, al ser víctimas de la violencia en al menos dos ocasiones y mantener una espera larga por el subsidio económico, reconoció Francisco Castro Escárraga.

El presidente de Concentradora en Cajeme del Transporte Público (Concatrapsa), consideró que viven una etapa demasiado complicada.

“Vivimos una etapa muy difícil por los actos de violencia (en el que fallecieron tres directivos del transporte de Cajeme y el reciente atentado a un operador)”, apuntó.

Sobre el caso más reciente ocurrido la semana pasada, citó la declaración de un testigo, bajo el argumento de la molestia de quienes tripulaban el vehículo particular, por considerar que el camionero les cortó circulación para derivar en los disparos al conductor.

De las pláticas con funcionarios del Gobierno del Estado, señaló que ya hace tiempo que se reanudaron y les alienta la promesa de que llegarán los recursos y se cambiará la estructura, pero nada se ha concretado.

Castro Escárraga negó que hayan sido bloqueados para introducirse a las instalaciones de concentración de los transportistas en el Parque Industrial.

Informó que el sábado pasado la asamblea nombró secretario de Concatrapsa a Gilberto Reyes y como tesorero a Bernardo Beltrán, así como a nuevos vocales, de quienes no dio el nombre.

Quienes les antecedían fueron cambiados por disposición de la asamblea, dijo, por no estar de acuerdo con su actuar.