Alrededor de 400 automóviles participaron en la marcha sobre ruedas que organizó el Movimiento Ciudadano por el Agua para manifestarse contra la construcción del acueducto “Independencia”, que unirá a la presa del Novillo con Hermosillo.

La marcha, organizada por el sector femenil del Movimiento, inició frente al teatro del Itson, en la entrada sur de la ciudad, y recorrió la calle 200 hasta la California, de donde enfiló por la avenida Náinari hasta la Miguel Alemán y desde allí hasta la carretera Internacional la salida norte.

Aunque se había propuesto llegar hasta Esperanza, las organizadoras decidieron que la caravana retornara desde el punto donde se encuentran las instalaciones de Pemex, a tres kilómetros de la ciudad, debido a la lentitud de la marcha y para no hacer más tiempo.

La marcha concluyó con el regreso a la ciudad, frente a la estatua del Danzante Venado, donde se dispersaron la mayoría de los automovilistas participantes.

Algunos se quedaron en ese lugar donde prendieron fuego a un ataúd improvisado que simbolizaba “la muerte del acueducto”.

No hubo oradores y las organizadoras sólo expresaron su satisfacción por considerar que el evento había cumplido con su objetivo de mantener viva la oposición al acueducto.