|
||||||
Tú no estás para saberlo, lector, pero cómo se me hace que la noticia que acaba de dar el gobierno del estado en el sentido de que ya se han inscrito más de 40 empresas para licitar en la obra de lo que pudiera ser el acueducto Independencia, más que amilanar el estado de ánimo de los integrantes del Movimiento Ciudadano por el Agua, más que achicarlos, los puso en tal condición que a partir de ayer decidieron irse con todo en contra de todo lo que huela a la construcción de la citada obra hídrica con la que Padrés pretende rubricar su programa de gobierno. En volante a tamaño carta que desde ayer circula por Cajeme y buena parte del sur del estado, los promotores del Plhino y la desalación califican de arrogante la postura del mandatario sonorense a quien, según ellos, no les interesa el futuro de Sonora. Según afirman en su escrito, de esta manera, el ejecutivo estatal se despojó de sus atuendos de humildad para dar cumplimiento, --dicen—a los intereses privados que quieren especular con el agua. Y agregan: “La arrogancia de quien prometió – gobernar con humildad—se alimenta en el desprecio por el bienestar general de los sonorenses y en la sumisión a los intereses financieros que quieren convertir el agua del Río Yaqui en una mercancía para apalancar negocios especulativos en detrimento del desarrollo económico de Sonora y de la producción nacional de alimentos. Truenan duro, yo diría que como nunca, en defensa de sus intereses y concretamente porque la cuenca del río yaqui permanezca inalterable, cuando advierten que “ nada ni nadie podrá estar por encima de lo que es justo. Siempre habrá mentirosos, pero nunca la mentira prevalecerá sobre la verdad”. Bueno, eso es lo que señalan abiertamente los opositores, los que por cierto, como lo precisan en su escrito, no son unos cuantos, ahora falta esperar la respuesta que sin duda tendrá que darse por parte del gobierno del estado. Al respecto del número que se mueve en torno al No al Novillo, estos rubrican su escrito con el siguiente mensaje: “ La peor ceguera de quienes se hacen adictos a las imposiciones y actos de fuerza, es no percatarse del poder que anima a un pueblo resuelto a defender lo que es justo y el futuro de una región que tiene la misión de producir alimentos para la nación”.
Y a propósito de cerrazones, otro que también insiste en hacerle al Carlos Salinas al no ver ni oír a sus interpeladores es el titular del Codeson en la entidad, Vicente Sagrestano el que todavía a estas alturas insiste en no reconocer los adeudos que la dependencia tiene para con un buen número de compañías privadas que en su tiempo creyeron en la seriedad y la honorabilidad de la institución que durante el sexenio anterior dirigió el ahora diputado, Carlos Rodríguez Freaner y a quien Sagrestano señala como el chico malo de la película cuando lo cierto es que el Codeson tuvo una de sus mejores épocas, de ahí que no se vale, pues, que Sagrestano quiera justificar su pésimo desempeño echándole las culpas a otros. Es muy posible que, como señala Sagrestano, haya habido algunos funcionarios del sexenio anterior que, aprovechando su cercanía con el pasado mandatario se hayan aprovechado de su cargo para despacharse con la cuchara grande y se hayan cobrado a la Chino, como fue el caso del chino Lam de quien se dice, fue uno más de los proveedores de la Codeson y que, antes de dejar el barco, se mandó pagar cuanto se le debía a la empresa que levantó en forma ex profesa para vender sus servicios a la dependencia para estatal, sin embargo, no se vale que los actuales directivos estén midiendo a todos con el mismo rasero; actualmente hay muchas empresas a quienes se les adeuda desde hace un año y ya no digamos que no se les paga sino que, ni siquiera son atendidos para ser escuchados en su demanda de pago y cuando nada tienen que ver con el chino de marras, el chico de los dieces y la extraordinaria inteligencia, si, pero para favorecer a sus propios intereses y para lucrar con los cargos que le fueron conferidos. Y en más de oportunistas, llega a tiempo la llamada del amigo Rubén Rojas Martínez para aclarar dos puntos con el columnista: La primera es que, él como comerciante instalado a orillas de la Laguna del Náinari es el primer agradecido con el gobierno de Manolo Barro por ser el alcalde que más tiempo, dinero y esfuerzo le está dedicando a la remodelación de este magnífico lugar turístico de Cajeme, mismo que, según Rojas, será una obra que habrá de trascender a la historia debido a la magnitud de la misma y, dos; para desmentir una información que, en su nombre, se dio a conocer en días pasados en algunos diarios de la localidad, en donde según está, él, Rubén Rojas, califica de intrascendentes las obras en mención y señala la supuesta lentitud que llevan las mismas y el atraso que esto representa para la mayoría de los comerciantes que tienen sus negocios por esos rumbos. Aclarado el punto, Rojas Martínez lanza una llamada de alerta tanto a la prensa escrita como a la hablada para que en lo sucesivo no se dejen sorprender por este tipo de gente que usa el nombre de otros, y hasta la actividad, para ensuciar una buena labor, una buena obra como la que se desarrolla por rumbos de la Laguna del Náinari. Y la frase de la semana corre por cuenta y riesgo del popular Tocho Méndez, actual agente fiscal del estado en Cajeme y ex diputado local: “ Claro que la quiero”, en abierta alusión a su aspiración para convertirse en el próximo dirigente del PAN cajemense en substitución del regidor, Héctor Rodríguez Camacho. Por supuesto que habría que esperar lo que tengan qué decir los militantes y aquellos que finalmente dicen la última palabra…los consejeros, claro. Sugerencias y comentarios: premiereditores@hotmail.com |
||||||
Copyright © 2006-2024. Todos los Derechos Reservados |