Porque nadie debe estar por encima de una resolución judicial, la Tribu Yaqui tiene brigadas en defensa del agua del río, manifestó Tomás Rojo Valencia.
A nombre de las autoridades tradicionales de Vícam y Pótam, enfatizó que la resolución del magistrado Rubén Gallardo Zúñiga de que nadie debe hacer obras que afecten los volúmenes del agua del río Yaqui, debe ser atendida cabalmente.
Se dispondrá de vigilancia permanente para evitar que alguna autoridad quiera emprender obra alguna y las brigadas ya recorren cada pueblo para dar información y reclutar apoyo para sus acciones, destacó.
Con la resolución del Tribunal Agrario se reconoce y se les da voz como autoridades tradicionales, manifestó, y a pesar de las diferencias internas ningún yaqui está en contra de la lucha por el agua.
El gobierno puede decir que hay contratos preestablecidos sobre los derechos de agua e incluso que hay contratos hasta por el agua de lluvia, expuso, pero lo cierto es que no deben alterarse los volúmenes de agua de las presas La Angostura y El Novillo.
Hasta que a la Tribu Yaqui se le restablezca el 50% del agua que le corresponde de La Angostura y los escurrimientos del río que van hacia El Novillo, se desactivará esta lucha histórica, enfatizó.
La etapa judicial que se vive con el agua, dijo, habrá de culminar en darle a los yaquis, pero también a los productores del Valle del Yaqui la certeza jurídica y a las autoridades las bases para tener un pueblo unido.