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Alegorías
Jesús Huerta Suárez Miércoles 11 de Abril de 2007

Años atrás, algunos años atrás, escuché por primera vez la canción “Beautiful boy” de John Lennon, compuesta para su hijo Sean Ono Lennon que recientemente había nacido, y pensé, es la más hermosa canción de cuna que he escuchado.

Por ahí, en una de sus estrofas dice “Life it´s what happen to you while you´re busy making another plans”; que pudiera traducirse más o menos así: Estar vivo es lo que te sucede mientras tu estás ocupado haciendo otros planes.

Lo antes dicho se me quedó muy grabado, al grado que lo recuerdo constantemente para tratar de entenderme y para tratar de comprender a los demás; ya que por lo general, siempre nos estamos quejando de todo, que si hace aire porque hace aire, que si hace calor porque hace calor, que si no nos alcanzó el dinero, que si nadie nos pone atención, que si estoy un poco más gordito, que si mi equipo no gano, que estoy un poco más viejo, y así, un sin fin de reclamos y de lamentos por todo lo que sucede a nuestro alrededor, e incluso, por sentimientos que acontecen en nuestro interior y que no sabemos cómo o que no queremos asimilar, pero siempre como que estamos esperando que todo cambie para al fin poder sentirnos bien y disfrutar de la vida, la misma que ahora está pasando ante nuestros ojos y ante nuestros corazones y la dejamos pasar sin meterle mano.
Hasta que de repente dices: ¡Alto!, esto no me esta gustando y entonces, es cuando las cosas comienzan a mejorar.

Comienzas a darte cuenta que tu vida está llena de grandes simples cosas, que eres afortunado al no tener lo que quieres pero querer lo que tienes, del poder levantarte en las mañanas y escuchar el canto de los pájaros, del color de las flores, de las palabras de tu hijo, del tener un trabajo por más humilde que éste sea, del tener algo o alguien en quien creer, del que alguien crea en ti, del poder disfrutar de tu música favorita, del silencio ensordecedor, de los olores, de lo bueno de lo malo, de tus recuerdos, de tus fracasos y de todas esas pequeñas cosas que van llenando, poco a poco, nuestras vidas, y que, al final de nuestros tiempos seguro guardaremos como las grandes joyas del tesoro en nuestro corazón que aún puede latir.

Yo, ya me propuse, disfrutar de todo, incluso del dolor, de la noche, por más obscura que esté, de la soledad, de tu olvido, de mis arrugas, de tu fingido saludo, de tus dulces mentiras, de la amarga verdad, de los altos costos, de la tierra que trae el viento, de las hojas que caen en lo recién barrido, de los políticos enanos, de los lienzos sin terminar, de los whiskis escasos, de las canciones de cuna y de los abrazos sin dar, después de todo, VIVIR es lo que nos ha tocado aunque nosotros tengamos otros planes.

“Lo único que nunca cambia es que todo cambia”
jhs