• Secuestran agentes de la PGR a Cajemense a quien sacan de su casa con lujo de violencia y prepotencia, pero, oh!, sorpresa, no era el capo que imaginaban.
• Inseguridad, Prepotencia, Corrupción, Democracia electorera, Inequidad y Pobreza Extrema; porque tú eres México, feliz centenario de la Revolución!

Aunque dudo que vaya haber una sola autoridad u organismo que salga en su defensa, menos quien responda por los daños ocasionados a su familia, sobre todo a sus pequeños hijos, considero que es un deber y una responsabilidad el dejar plasmados en letras de molde, la arbitrariedad y el abuso cometido en perjuicio de un ciudadano cajemense por parte de un grupo de testaferros  -agentes, dicen ellos- de la subdelegación de la PGR con sede en esta ciudad, con los riesgos, por supuesto, que esto conlleve para el columnista y su familia.

Villanía tan infame merece correr el riesgo y desde este momento hago responsables a los agentes de la PGR local de cualquier “ accidente” que pudiera ocurrirme a mi o cualquiera de mi familia.
 No es posible que este tipo de vejaciones se sigan permitiendo y sobre todo, se queden impunes, por más que se realicen “ en nombre de la ley” o amparados en una placa oficial. Desde este momento les dejo en claro tanto al delegado de la PGR Sonora, Jorge Rodríguez Velázquez , lo mismo que a la subdelegada en esta plaza, Brenda Lohr, así como al titular de la PGR en el país, Arturo Chávez y Chávez que no cejaremos en nuestro empeño de que estos gorilas reciban su merecido, pues las cosas no pueden quedar en un simple “ usted disculpe”, como tampoco vamos a aceptar que el día de mañana nos salgan con que Mario, ( de momento me reservo sus apellidos, por más que ellos sepan bien  de quien se trata ) era el hombre que vino a substituir a Arturo Beltrán Leyva en el cártel del Pacífico o que por lo menos era dueño de un enorme laboratorio de drogas, ubicado en Agua Prieta como se les dijo, desde un principio a sus familiares para finalmente resultar con que se trataba de una equivocación y a quien buscan no es a Mario, sino a un homónimo de éste que radica, supuestamente también en Cajeme.

Por lo pronto y mientras a la sección de “ inteligencia” de la PGR en Sonora, no le han bastado más de 72 horas para determinar que este no es el hombre al que buscaban, Mario sigue detenido en Agua Prieta y su familia hace esfuerzos sobrehumanos por conseguir hasta la factura de los chamacos para demostrar que Mario es y sigue siendo un hombre que trabaja honestamente para alcanzar el sustento de los suyos.

Señor procurador Chávez: Mario fue sacado de su casa con lujo de violencia y prepotencia, vejando a todos los integrantes de la casa habitación en donde radica al lado de su familia a altas horas de la noche y a los gorilas que iban en nombre de la ley no les importó el daño psicológico que han causado a sus hijos al haberlo esposado y golpeado delante de ellos y no es posible aceptar que aun cuando ya se dieron cuenta de su error, a su familia les sigan dando largas para liberar al jefe de la casa que fue trasladado a Agua Prieta momentos después de que fuera detenido. De qué se trata, de qué estamos hablando, señor procurador?.
 Entendemos que en Sonora y México se libra un intenso combate en contra del crimen organizado, pero casos como el de Mario nos confirman que las cosas se siguen haciendo con las patas y no con la inteligencia y la estrategia que requieren este tipo de acciones.

¿Cómo es posible que se sostenga entre las filas del combate a la delincuencia a gente que no le es posible distinguir entre un maleante y gente que se dedica a subsistir en medio de ésta economía mediocre que nos permite el gobierno del cambio y del trabajo de Felipe Calderón.

Y finalmente,¿ por qué no se aplica esa misma celeridad con que se actuó de manera ilegal y arbitraria al momento de detenerlo, para ponerlo en libertad.? Quién responde ahora por los daños causados a su familia y por todo ese tiempo perdido además de los gastos inherentes que conlleva un traslado de Obregón a Agua Prieta?

Ahora que, si se trata de presentar chamba, nada más por llenar el requisito como ha sido la costumbre en Cajeme a falta de auténtica labor de inteligencia—como fue el caso de Mario y, ¿de cuántos cajemenses más?—pues cuando menos avisen para estar preparados y que Dios nos agarre confesados. Porque de que hay chamba, si hay, nada más falta que los sabuesos de la PGR den con las tienditas y los tiradores que todo mundo saben que existen pero que ellos ignoran, quien $abe por qué extraños motivos. Usted si sabe, señor procurador?

FIERRITOS EN LA LUMBRE

Este pasado sábado, los mexicanos conmemoramos nuestros primeros cien años de nuestra revolución y fieles a nuestra identidad y forma de hacer gobierno, la celebramos a nuestro modo. De entre las muchas definiciones con que se retrata el México de nuestros días, me quedo, coincido en todo momento, con el resultado que nos ofrece la organización Mexicanos Primero y que pinta de cuerpo entero el México de nuestros días: Un México en el que prevalece la inseguridad ( fomentada por gorilas prepotentes vestidos de agentes de la PGR de Cajeme ), la corrupción, una democracia puramente electorera no participativa, manipulación electorera, patriomonialismo y dependencia, abusos en derechos humanos, insalubridad ( como la que se presenta en el Nuevo Tijuanita que se levanta por lados de la Central Camionera y su Bar Central y alrededores y en donde Control Sanitario y Salubridad se hacen de la vista obesa ), inequidad, empleo insuficiente, baja remuneración y pobreza extendida. Todos ellos, según la organización citada, son producto de la pobre educación que se ofrece en México y son el resultado del reporte Brecha: estado de la educación en México 2010 y en cuyo informe, el director de la organización David Calderón, cuestionó la operación del programa oportunidades y aseguró que se debe enseñar a los niños a dejar de ser dependientes para no tener este país de mendigos, de subsidios permanente en el que se espera la llegada del cheque para mitigar la ofensiva pobreza.

Sugerencias y comentarios; premiereditores@hotmail.com