Estudian variables de rendimiento de tomate
Redacción
Domingo 05 de Diciembre de 2010

En México, la productividad del tomate está atrapado entre las variables del clima y el comportamiento agronómico y fisiológico del cultivo.

Es por ello que cada vez se requieren más especialistas capaces de identificar las estructuras de invernadero adecuadas para las diversas condiciones climáticas.

Manuel Antonio Cázares Castro, presidente del Sistema Nacional Producto Tomate, indicó que mediante el tercer diplomado internacional en Horticultura Protegida, se prepara a personas que permitirán incrementar la productividad de este cultivo.

A este curso, realizado en el Instituto Tecnológico de Sonora, acudieron alumnos de Chile, España y Venezuela, además de Morelos, Jalisco, Sinaloa, Guanajuato, Coahuila, Puebla y  Baja California, entre otros.

Es emocionante recordar que en el año 2006 arrancaron estos diplomados que ahora ya están dando resultados concretos tanto en el estado de Sonora como en el resto del país y el mundo.

Ser competitivos es el objetivo de este diplomado, expuso, pues la industria del tomate genera divisas y sobre todo empleos, por lo cual es importante capacitarse para enfrentar nuevos retos.

Cázares Castro dijo a los graduados que “México los necesita a ustedes, necesita gente capaz; los mexicanos somos guerreros, no nos damos por vencidos. Este es el camino para el progreso y el beneficio de los productores del tomate”.

Este lunes arranca en Obregón la reunión nacional del Sistema Producto Tomate, a la cual concurrirán productores de todo el país para inaugurar las oficinas establecidas aquí.

México se encuentra entre los principales exportadores de tomate, con un 16% de la producción mundial, seguido de Siria, España, Países Bajos, Jordania y Turquía.

Al año se producen alrededor de dos millones 727 mil 691 toneladas, con un valor de la producción no menor a los mil millones de dólares, expuso.

En invernaderos se logran cosechas de hasta 350 toneladas por hectárea, sostuvo, y en la modalidad de malla sombra se logran hasta 160 toneladas por hectárea.

En contraste, a cielo abierto la máxima producción se ubica en las 40 toneladas por hectárea, precisó, y de las 101 mil 328 hectáreas sembradas con tomate, a Sonora le corresponden mil 200.

 

 
 

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