ALÉGALE AL AMPAYER. Señores aficionados, siéntanse orgullosos, porque su equipo, nuestro equipo, el equipo de todos, los increíbles Yaquis están ya en la Gran Final de la Liga Mexicana del Pacifico.

En un ambiente hostil, de mucha pelea y batalla en Los Mochis, Sinaloa,  la novena diseñada por Rene Arturo Rodríguez y dirigida por Eduardo Díaz, mostraron otra de las caras que tiene el equipo, la cara de combate, Obregón se demostró como una unidad que no se da por vencida, porque aun en patio ajeno y en uno de los mas dramáticos episodios en la historia beisbolera de nuestra ciudad, los Yaquis sacaron un triunfo glorioso en contra de Cañeros.  

La victoria se dio gracias al poder en las muñecas de  “El Animal” Víctor Díaz, del  “Chapis” Carlos Valencia y por supuesto del cortante relevo del “dúo dinámico”“Súper Mario” y “El Chicote”, quienes dieron la pauta para el milagroso retorno. Un punto importante que hay que tocar es que el regreso milagroso se dio contra uno de los más potentes pitchers mexicanos, Francisco Rodríguez, el mismísimo grandesligas, el lanzador de los Angelinos de Los Angeles, quien simplemente no pudo contener con sus pedradas la explosiva artillería de los de Cajeme. 

Luis Ignacio Ayala ha sido una adición importante. “El Chicote” viene lanzando en forma formidable y hermética y eso continuo en los partidos celebrados en el “Emilio Ibarra Almada” donde el sinaloense demostró sus buenos modales a los Cañeros la noche del viernes al desearles, los buenos días, buenas tardes y buenas noches y retirar en orden consecutivo en la sesión sabatina a las fuertes majaguas cañeras. 

Pasando a otro tema, aun en tiempos de gloria, tiempos de victoria, existen las personas (no solo los sospechosos comunes) que no reparan en buscarle cosas o situaciones negativas a una cuestión que no las amerita.

Se habla mucho en algunos medios o fanaticada del poco funcionamiento de algunos elementos del equipo de casa a la hora de batear o a la hora de fildear.

Como es posible esto?, señores esto es un equipo, una unidad de trabajo, esto no es cosa de un pelotero, no hay absolutamente ningún jugador en el lineup titular que no haya decidido o contribuido en algún partido del playoff o semifinal ninguno, las estadísticas y box scores son la prueba de lo que aquí les estoy diciendo..

El estratega dominicano ha mantenido su misma alineación durante esta extraordinaria racha de triunfos, los cuales ya suman siete en forma consecutiva.

Si nos vamos al final de la temporada y contamos a Navojoa, playoff y semis los Yaquis tienen un formidable record de 11-1, el unico negrito en el arroz siendo el segundo partido del playoff en contra de Naranjeros.

Cuando un equipo se encuentra embalado, no se realizan modificaciones, no se juega con la suerte, con el mono, no es por superstición es simplemente por sentido común, parafraseando un dicho estadounidense “si no esta averiado, no hay nada que reparar” y un dicho del argot beisbolero “Line-Up ganador, no se cambia”.

Cada quien tiene su derecho a expresarse, Díaz tomara la decisión, el es el unico que puede realizarlo, su análisis ha sido el factor para no mover las piezas, el sabe y conoce las capacidades y deficiencias de su plantel, este tipo de decisiones no se dan  por arte de magia o por actos de rebeldía.
 
Fornes, Valencia, Murillo, Cabrera, Clark, Herrera, Díaz, Franco y Cañizares a la hora de ofender y defender y Mendoza, Valdez,  Quevedo, Bueno, Castellanos, Ramírez, Mendoza y Ayala sobre la loma de las responsabilidades, han puesto cada quien su granito de arena, no hay ninguno que durante las pasadas ocho victorias no haya contribuido, unos mas, otros menos, pero todos pueden ver a los ojos al manager, directiva y afición y sentirse orgullosos y seguros que están haciendo su trabajo, complementando a la mezcla que se ha conjuntado. Cada uno de ellos agrega un ingrediente importante al platillo final, el cual es en términos gastronómicos “Un Platillo Gourmet Delicioso “, nuestros Yaquis de Obregón.

Por hoy se acabó, nos vemos en el estadio.
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