Desde que llegó al Senado de la República a ocupar la curul que dejó vacante el ahora gobernador de Sonora, Guillermo Padrés, la senadora suplente Emma Larios ha realizado un trabajo destacado y de relevancia entre sus pares.

Como legisladora ha comenzado a tomar posturas de altura, de carácter extraterritorial, tendientes a revisar temas de interés estatal y nacional, como la reconstitución de las relaciones comerciales y  de seguridad entre Arizona y Sonora.

La semana pasada se reunió con el alcalde de Phoenix, en un intento por superar las diferencias entre Sonora y Arizona, generadas hace un año por la aprobación de la ley antiinmigrante SB 1070, que ha generado un clima de hostilidad en contra de los connacionales.

 Y es que esa legislación racista afecta tanto a indocumentados de todo el país, que ingresan a los Estados Unidos en busca de trabajo; como a la población sonorense, que mantiene una estrecha relación comercial y familiar con Arizona, con la que comparte frontera.

En su calidad de integrante de la cámara alta, instancia a la que compete el tema de las relaciones exteriores, la senadora Larios Laxiola ya dio el primer paso en un asunto que corresponde abordar a la cancillería mexicana; pues el distanciamiento entre los estados vecinos ha afectado  directamente la  vida comercial y social de los sonorenses.

Las reuniones entre la legisladora Emma Larios Gaxiola y el alcalde de Phoenix seguirán en lo subsecuente; y con estos se buscará concretar proyectos de infraestructura, agua, educación y salud en la franja fronteriza, para llevar desarrollo y bienestar a los ciudadanos de las dos entidades vecinas, norteamericana y mexicana.

Las proyecciones muy precisas que se contemplan para el corto y mediano plazos entre Sonora y Arizona, hacen destacar  la labor de la senadora sonorense, que no se ha quedado en el discurso. Sino que ha mantenido el dedo en el renglón, para aportar su granito de arena en este amplio problema que constituyen las relaciones exteriores con el país norteamericano, por un lado y el tema de los migrantes y la falta de empleo en nuestro país, por el otro.

Los proyectos previstos para retomar las relaciones bilaterales entre Sonora y Arizona contemplan la ampliación de oportunidades de negocio para los jóvenes de ambos estados; así como el desarrollo del comercio de la entidad mexicana hacia el país del norte.

La seguridad

Sobre el delicado de tema de la seguridad entre México-Estados Unidos, la senadora sonorense  puntualizó en la reunión con el alcalde de Arizona, Phill Gordon, la necesidad de mejorar los mecanismos de regulación para la venta de armas de fuego de alto poder, para disminuir el tráfico de armas a México.

A pesar de que el tráfico de armas está más allá del alcance de legisladores y alcaldes, y que atiende a intereses de muy alto  nivel y a las políticas económicas del país norteamericano, es necesario que desde México se coloque el tema en la mesa de discusión; en un intento por buscar aminorar los problemas que ha acarreado, sobre todo en nuestro país, el problema del tráfico de armas.

La migración

Respecto del problema lacerante que resulta la migración de nuestros connacionales a Estados Unidos, lo que más apremia en estos momentos es sin  duda la defensa de los derechos humanos, ya que las agresiones verbales y físicas a los trabajadores indocumentados, ha llegado al extremo del asesinato, como el caso del  joven Ramsés Barrón Torres, en la frontera entre Sonora y Arizona.

Para cuyo tema la Comisión Permanente del Congreso federal realizó un pronunciamiento, pero sin ir más allá de los exhortos al gobierno federal y en particular a la Secretaría de Relaciones Exteriores; además de las condenas al imperio norteamericano.

Sin embargo, las oportunidades de trabajo y de desarrollo que la senadora Emma Larios está buscando para los connacionales en la franja fronteriza, de inicio entre Sonora y Arizona; es un paso loable y de reconocerse, en la labor que los ciudadanos mexicanos esperamos de nuestros funcionarios públicos.