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Estamos dentro de y frente a un sistema y una cultura que plantan las estructuras y la mentalidad que ahora tenemos y vivimos. Habitamos y convivimos dentro de estas estructuras y de una psicología social. A su vez esas actitudes y estructuras nos habitan, están introyectadas en nuestro modo de ser y de hacer. Si se obtiene una sentencia y castigo judicial efectivo para los culpables responsables de la tragedia, tendrá una utilidad social frente la corrupción y la impunidad que presiden este crimen contra la vida y la sociedad, el incendio de la Guardería ABC. La situación de marco, el sistema y la cultura se ha desnudado y se ha hecho visible para algunos o para muchos. Esa realidad grave y compleja permanecerá la misma, fuera de algunos ajustes en materia reglamentaria y de supervisión para guarderías, servicios y espacios similares. Hay que enfocar la realidad de marco, hay que conocer, entender y transformar lo que es necesario transformar, lo que puede y debe transformarse, partiendo primero de la vida personal de cada uno. Hagámoslo. Avancemos por allí, antes de que peores extremos aterricen en nuestro mundo y modo de vida. En el sistema hay una negatividad, una inercia y una acumulación que seguirá generando, necesariamente, flagrantes situaciones, nefastas y mortales, contra la sociedad y la vida, contra todos, aunque haya beneficiarios concretos. Hemos de ser coherentes y congruentes con el sacrificio sagrado de 49 vidas y con los calvarios de sufrimiento, que cumplen la misión de despertar y alertarnos frente a LAS CAUSAS y el MARCO, frente al SISTEMA y a la CULTURA SOCIAL que hacen posible que estas cosas sucedan. Este sistema, esta cultura y psicología es lo que produce –mediando actuaciones concretas de negligencia criminal- muertes, daños y sufrimiento, como en el terrible extremo de la Guardería ABC en Hermosillo, y lo sigue haciendo, a través de un subsistema de subrogación de las funciones y tareas a cargo del Estado y del IMSS que se ponen en manos de empresarios particulares, en el marco de la privatización de las responsabilidades y deberes del Estado mexicano. La Guardería ABC no es un evento aislado y casual en el marco de un sistema y en medio de una cultura social. El 5 de junio es un amargo despertar, el alumbramiento de conciencias cimbradas por la dolorosa tragedia de la Guardería ABC que se configura en un movimiento social con expresión decidida y activa de reclamos y exigencias. El 5 de junio genera un movimiento ciudadano pacífico que se asume o se puede asumir como lucha social por la TRANSFORMACIÓN de la cultura social y del Estado mexicano. Estamos en una lucha y en un movimiento social espontáneo, auténtico, que ahora está en la posibilidad de buscar y definir, de aclarar consciente y públicamente su vocación, su RESPONSABILIDAD, sus alcances, su razón de ser: Qué es lo que no es; Qué es lo que quiere ser. EN LA TOMA DE RESPONSABILIDAD SOCIAL de los padres de familia ¿Hay un MÁS ALLÁ de la Guardería ABC?... ¿Ven, sienten y toman responsabilidad social por las causas de fondo que hicieron y hacen posible la tragedias y daños como los de la Guardería ABC? Habemos quienes creemos y pensamos que este Movimiento y Lucha más allá de las extremas y convocantes circunstancias está ante la necesidad actual de buscar, encontrar y definir su identidad desde las circunstancias particulares de la Guardería ABC y más allá de las mismas. Es el tiempo de revisar y examinar, de evaluar; de enfocar y enfrentar otros aspectos y tomar decisiones -si se quiere así- más amplias e incluyentes, sin perder las dramáticas raíces ni las condiciones y las implicaciones directas que han generado y animado a esta movilización de digna indignación. El 5 de junio es una poderosa sacudida emocional -un impacto a las conciencias por el dolor y el horror- que exige serenidad y reflexión, entendimiento y comprensión del suceso en sí, en sus circunstancias y en lo que implica; entendimiento y comprensión de lo que está detrás y en el marco de la Guardería ABC. Habemos quienes pensamos y creemos que el Estado es instrumental y ha de ser positivo. El Estado ha de ser un instrumento para servir a la sociedad, a las familias y a las personas, a los seres humanos. Para eso estamos juntos, para estar bien y ser mejores, no para la rebatinga o para que algunos exploten, atropellen y aprovechen indebidamente victimando a otros. EL ASPECTO ÉTICO CULTURAL. Puede decirse social y culturalmente –psicológica y éticamente- que TODOS, los de “dentro” y los de “fuera” del sistema que vivimos, tod@s y en diferente grado, en el gobierno y en la sociedad civil, todos padecemos de diferente manera los mismos males causales que nos aprisionan, nos enferman y destruyen: la ignorancia de la realidad y la verdad; los excesos de un egoísmo negativo que manifiesta nuestros faltantes de responsabilidad para con nosotros mismos en lo individual y para con nuestras comunidades y el conjunto social. Ha llegado el momento y la oportunidad de dar pasos que nos encaminen como Movimiento 5 de junio a resultados concretos en la búsqueda de Verdad y Justicia, mediante acciones inmediatas y de largo alcance: Legitimación, promoción, e instalación de una Comisión Ciudadana de la Verdad. Foro de consulta y análisis sobre el sistema de subrogación, en el marco de las responsabilidades sociales del Estado de Bienestar La atención y cuidado de los niños -tampoco el sistema de seguridad social, ni el Estado- no deben depender o subordinarse a la lógica del capital y de la ganancia empresarial. La satisfacción de necesidades sociales y humanas debe ser asumida responsable y eficientemente por el Estado Mexicano de modo contundente, franco y concreto sin deterioro de la calidad en los servicios ni pérdida de la universalidad de los derechohabientes: El Estado ha de ser bueno para todos y su existencia ha de ser para servir a las familias y a la sociedad en su conjunto, y ha de hacer bien sus tareas. Socialmente hablando, en el marco y trasfondo de la Guardería ABC, esto parece ser y puede ser la gran lección y la gran exigencia del Movimiento y Lucha 5 de junio acompañado por la corresponsabilidad de la participación ciudadana y social. Si procedemos con claridad, coherencia y congruencia, podemos avanzar en la transformación de las condiciones que a todos nos dañan y que hicieron posible la tragedia. Esto puede ser el mejor homenaje a los niños de la Guardería ABC Necesitamos de un mundo bueno y suficiente para todos: “Un mundo construido con el Corazón y la Verdad”.
Rogelio Valenzuela Parada / CER, Centro de Estudios y Reflexión |
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