Cómo se me hace que el caso López Obrador quien ayer presentó su solicitud de licencia para separarse de las filas del PRD va más allá de un simple desaguisado con la cúpula del Sol Azteca y el supuesto contubernio de estos con Calderón es la gota que derrame el vaso del tabasqueño.

Ya encarrerados,-- piensa mal y acertarás—no es difícil descartar que el meollo del asunto está en que la dirigencia perredista le niega al peje la candidatura amarilla para contender de nueva ocasión por la presidencia de la república, una posición que los chuchos ya podrían tener reservada para cualquiera de estos dos personajes; Marcelo Ebrard Cassaubón el actual jefe de gobierno capitalino o bien, el mismísimo Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, quien ya la buscó en par de ocasiones y al igual que López Obrador, la ganó ( ante Carlos Salinas ) pero tampoco pudo quedarse con ella como sucedió hace cuatro años con Andrés Manuel y el hombre que tuvo que entrar por la puerta de servicio del Palacio Legislativo para poder rendir protesta como sucesor de Vicente Fox quien si no tuvo ningún contratiempo serio cuando materialmente mató dos pájaros con su arribo al poder; aplastó a sus opositores ( Francisco Labastida, del PRI y a Cárdenas Solórzano ) y aplastó de paso todo su capital político al hacer un pésimo papel como primer mandatario y no cumplir las expectativas que había levantado en campaña.

Es decir, de excelente candidato, mucho más, pero con mucho, mejor candidato que Felipe Calderón, pasó a ser un mal presidente.

De vuelta con López Obrador, su salida de las filas del perredismo prácticamente es una renuncia anunciada con mucha anticipación pues, si como recordamos, el hombre se ha declarado por siempre enemigo de las concertacesiones que de un tiempo atrás ha venido haciendo el alto mando perredista con sus enemigos de ideología y de rumbo, los panistas, a la hora de ir por el poder como ha ocurrido últimamente en los estados de Oaxaca y Puebla. Igual postura ha mostrado Cárdenas Solorzano el ideólogo y fundador del PRD.

Otra de las grandes lecturas que presenta el parteaguas que sin duda representa la salida de AMLO del PRD es que, todo hace indicar que panistas y perredistas ya llegaron a un arreglo para ir juntos por el gobierno del Estado de México lo que de paso significa ir por la cabeza de Enrique Peña Nieto el actual caballo negro del PRI para recuperar la presidencia de la república en el 2012.

Conocido el amarre de López Obrador con Alejandro Encinas a quien dejó de sucesor en los tiempos en que gobernó la capital del país bajo las siglas perredistas, todo hace pensar que Encinas no está en los planes de Jesús Ortega y sus chuchos lo que lleva a pensar en la siguiente posibilidad;¿ si Encinas, que ya es el candidato de Andrés Manuel en el Estado de México no va por el PRD, entonces, lo que se puede esperar en las siguientes horas es la salida de éste de las filas perredistas para contender por el cargo, pero ahora envuelto en los colores de Convergencia y el PT como se presume que lo hará el propio López Obrador en su segundo intento por llegar a los Pinos?.

A juzgar por el tono que maneja en su misiva, Andrés Manuel, y la condición que subraya ( por el tiempo en que se mantenga el contubernio ) todo hace pensar en que la renuncia es más que definitiva.

Esta es parte de la carta:

"Por este medio me dirijo a usted de manera respetuosa con el propósito de que ponga a consideración del Consejo que preside, mi solicitud de licencia como militante del partido por el tiempo en que se mantenga el contubernio de los dirigentes nacionales del PRD con Felipe Calderón y el Partido Acción Nacional".

En su carta, el tabasqueño subrayó que ha decidido dedicar todo su tiempo a seguir fortaleciendo al Movimiento Regeneración Nacional, en el cual participan militantes del PRD, PT, Convergencia y ciudadanos sin partido.

"Mujeres y hombres de buena voluntad que luchan, con autenticidad y sin engaños, por la transformación de la vida pública del país", aseveró.

Sostuvo que de ninguna manera puede convalidar el proyecto de lo que llamó "la mafia del poder", que pretende consolidar un bipartidismo de derecha, con el PRI o con el PAN que, al final de cuentas, representan lo mismo.

"Es decir, prolongar el régimen de opresión, corrupción y privilegios que está destruyendo al país y afecta cada vez más el bienestar y la tranquilidad de la mayoría de los mexicanos".

Como reza el slogan de conocida marca de cigarros:

En el caso de López Obrador y el PRD todo está dicho:

El tabasqueño buscará la presidencia a través de las filas del PT y Convergencia y lo mismo hará Alejandro Encinas por convertirse en el verdugo de Peña Nieto el que, en caso de perder, le estarían abollando el encerado copete y con ello, las posibilidades de convertirse en el próximo candidato del PRI por la presidencia.

Por lo que toca al PRD y su lucha por alcanzar la primera magistratura del país, tampoco no hay de otra sopa; será Ebrard, lo que estaría dando la nota interesante de la contienda al ver arriba del ring a los inseparables carnales en busca de la misma corona.

FIERRITOS EN LA LUMBRE.

Lo que también resulta un hecho; Acapulco vive en medio del narcoterrorismo. Así lo demuestra el descomunal acto de barbarie ocurrido ayer en la que un grupo de sicarios esparció, frente a una casa (propiedad, tal vez de los parientes del victimado ) los despojos de un hombre a quien descuartizaron. Navojoa, en tanto, se puso en boca de la opinión pública nacional tras el decomiso del fuerte armamento ocurrido ayer, por parte del ejército. La pregunta sigue siendo la misma para nuestros primos del norte:¿ Cómo llegó aquí ese arsenal? De la frontera norte a Navojoa es mucho el recorrido y por tanto, mucho el riesgo y más la duda. Sugerencias y comentarios; premiereditores@hotmail.com