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Salvo los vientos desatados, todos los otros males de los que habla el poeta y político chiapaneco, Jaime Sabines, en su poema, “Me encanta Dios”, -- uno de los preferidos del columnista-- se le han venido de un solo golpe a la nación que por años ha sido ejemplo de tenacidad y coraje. Japón supo levantarse de los grandes estragos que le costó la aventura a la que llevaron al Emperador Hirohito sus militares, durante la Segunda Guerra Mundial y que costaría la vida de millones de sus súbditos tras los bombadeos a Hiroshima y Nagasaki por parte de las fuerzas estadounidenses y que obligarían a que el soberano inclinara la testa ante los aliados. Forjados en la disciplina y el trabajo, pueblo y gobierno japonés colocaron al pequeño país ni más ni menos que en la tercera potencia mundial en materia económica después de los Estados Unidos y China. Y ojo, como para que lo apunten aquellos que ahora se hallan agarrados del chongo (Humberto Moreira, PRI, y Gustavo Madero, PAN ) lanzándose mutuas acusaciones del atraso y la pobreza por la que atraviesa México, desde tiempos inmemoriales; ese gran avance y transformación lo lograron los japoneses en tan solo cincuenta años; esos y otros veinte años más, curiosamente, son los que inexplicablemente tiene de atraso un pueblo que es cuatro veces más grande que Japón, territorialmente hablando y que tiene menor población que los orientales. Dice el dicho y dice bien que las comparaciones siempre serán odiosas, pero por desgracia ese es el caso de nuestro México cuya economía no tiene ni por asomo, la menor comparación con esta que es, la tercera economía del mundo. La naturaleza, por desgracia, que no tiene palabra de honor, ha hecho estragos a la pequeña ínsula de 377 mil 873 metros cuadrados y a casi a una semana de ocurrido el terremoto y el Tsunami (la ola grande), ahora está al borde del colapso nuclear.
Y a propósito del affaire verbal que se ha desatado entre los dirigentes del PRI y del PAN, es muy posible que a don Gustavo no le falte razón en cuanto a quién es quién a la hora de haber producido mayor calamidad al país, si, pero lo que también no deja de ser una contundente verdad es que ni Fox ni Calderón han hecho lo más mínimo para paliar un poco el cáncer que sigue creciendo, no obstante a que llegaron vendiendo un sinfín de fórmulas mágicas y que al fin de cuentas no llegan ni a remiendos. FIERRITOS EN LA LUMBRE Pues palabras más, palabras menos, al juzgar por el acuerdo que circuló ayer por todas las redes sociales, todo está dicho en materia legal en relación a la ilegalidad o no, que si hubo o no desacato en la licitación del acueducto independencia: Este es parte del texto que desde ayer se halla en circulación y del que tendrán mucho que decir por rumbos de la Conagua, Palacio de Gobierno y los productores del Valle del Yaqui: Y, volviendo con Sabines, yo por eso mejor me quedo con los versos del chiapaneco a quien lo único que tengo que reprocharle es su paso por las escurridizas aguas de la grilla y que en un tiempo lo llevaron a alcanzar una diputación federal, por el PRI, para más señas. “Viejo sabio o niño explorador, cuando deja de jugar con sus soldaditos de plomo y de carne y hueso, hace campos de flores o pinta el cielo de manera increíble. Y en más del Japón, dueños de una férrea disciplina como son, nadie duda que el gigante económico de oriente se levante de nueva cuenta de sus cenizas para seguir siendo el más fiel ejemplo del coraje y el temple de su gente, bajo estas cinco milenarias reglas de oro que han venido atendiendo generación tras generación: •Seiri: Clasificación. Separar innecesarios •Seiton: Ordenar. Situar necesarios •Seiso: Limpieza. Suprimir suciedad •Seiketsu: Señalizar anomalías •Shitsuke: Disciplina. Seguir mejorando Sugerencias y comentarios: premiereditores@hotmail.com |
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