Después de su éxito literario "Dios mío, hazme viuda por favor ", del que vendió medio millón de copias, Josefina Vázquez Mota prepara su siguiente obra: "Díos mío, hazme presidenta por favor".

O al menos eso es lo que parece cuando se pasea en el escenario del Teatro del Itson, donde su conferencia es un evento típicamente preelectoral, aunque decir esto es una perogrullada.

Porque si de algo “tiene tablas” esta mujer economista, es su capacidad de motivar y convencer al público y  en especial al de su género al que mantuvo atento y entusiasmado, pese a las varias butacas desocupadas.

Vásquez Mota llegó bien escoltada por la diputada María Dolores del Río y el dirigente estatal del PAN, Juan Bautista Durazo a su cita en el teatro del Itson, donde una “nube” de reporteros ya la esperaban ansiosos.

Como si fuera una entrevista de permanencia voluntaria surgieron las mismas preguntas que provocaron las mismas respuestas: “No ando en campaña”, “México está preparado para que lo gobierne una mujer” y las infaltables frases sustentadas en el marketing político.

Ahí, la ex funcionaria de la alternancia mostró sus mejores armas que le permitirían convertirse en la quinta candidata mujer a la Presidencia de México, ya que antes lo fueron Rosario Ibarra de Piedra, Cecilia Soto, Marcela Lombardo y Patricia Mercado.

Nada más que con una gran diferencia a favor de la hoy diputada federal: Ninguna de ellas buscó la posición desde el poder, ninguna fue Secretaria de Estado como Vásquez Mota, que ya pasó por Desarrollo Social y Educación Pública.

Y es que la llamada “delfín” del calderonismo está en todo para agradar a la audiencia: Lo mismo da cifras para avizorar la generación del matriarcado, cita a Joaquín Sabina, lleva su discurso desde el feminismo light a las frases comunes que evidencian el machismo imperante.

El espíritu de Paquita la del Barrio flota en el ambiente.

Pero de que Josefina es hábil, es hábil. Es inteligente sin necesidad de meterse en elucubraciones mentales. Como buen bestseller, recurre a las frases seguras:

“Venir a Sonora y no visitar Ciudad Obregón, es como no haber venido a Sonora”, afirmó en un derroche de originalidad que le aplaudió su público.

Le interesa afirmar que “tiene faldas” y que seguirá la ruta de su jefe político en la lucha contra el crimen organizado: “Cuando un periodista me preguntó si una mujer estaba preparado para combatirlo, mi respuesta fue, que se atreven a tocar a nuestros hijos y sabrán de lo que es capaz una mujer”. 

También es una persona detallista. Al iniciar su conferencia comentó que entre el público se encontraba un compañero suyo de la generación 75-78 de la preparatoria vocacional el Politécnico con especialidad en técnico en informática.

De esos tiempos, el cajemense Humberto Hernández Gastélum recuerda a Vásquez Mota como muy competitiva y eso que no se veían hace cuarto de siglo.

“Es que ella se fue estudiar Economía en la Ibero y yo Ingeniería en Sistemas en el Tec de Monterrey, pero luego me regresé a Obregón a terminar la carrera”, cuenta orgulloso, mientras observa la retirada de su antigua rival en operaciones del álgebra.

La parte más emotiva de la conferencia, fue sin duda al recordar al escritor Germán Dehesa, tanto que su tono de voz se quebró por el nudo en la garganta que le provocó la nostalgia por el amigo ido.

“Ahí te encargo a México”, cuenta que le pidió antes de morir el autor de la columna La Gaceta del Angel, encargo que por cierto ha sido una de sus principales motivaciones para buscar la candidatura de su partido Acción Nacional.

Desde entonces, Vásquez Mota recorre el país para lograr el cargo que en otras latitudes ya lo obtuvieron varias mujeres, como en Chile con Michelene Bachelet, Cristina Fernández de Argentina y recientemente Dilma Rousseff en Brasil.

La pregunta no es si México está preparado que una mujer lo gobierne, más bien el principal obstáculo no se encuentra fuera de su partido sino dentro, pues Acción Nacional es un partido que ha sido acusado por las mismas mujeres de misógino.

En el 2000, el país estuvo preparado para que un ejecutivo de ventas de una trasnacional llegara a la Presidencia de México, pero ¿estará preparado para una versión femenina del vaquero de Guanajuato, sobre todo en eso de “cautivar” a las masas con frases extraídas de los pergaminos de Miguel Angel Cornejo?. 

Por lo pronto, Josefina trata de demostrar que cumple con el perfil y las múltiples cualidades que debiera tener el próximo redentor sexenal.

Si como han dicho analistas políticos "Lo que México necesita es liderato, proyecto, psicoanalista y publicista”, pues apunten a Josefina.