Desde la instalación hace tres años atrás del laboratorio de portainjertos, la horticultura protegida de Sonora ha estado libre del hongo fusario, dijo Manuel Antonio Cázares Castro.
El presidente del Sistema Producto Tomate añadió que el laboratorio no solo ha logrado erradicar la presencia de este hongo, sino además obtener resultados como una mayor producción en el cultivo del tomate, mayor vida de anaquel y menos costos de producción.
Además, dijo, con esta tecnología se contribuye al cuidado del medio ambiente al no utilizar productos tóxicos, como es el gas del bromuro de metilo.
La plaga del hongo fusario, recordó Cazares Castro, provocó que hubiera zonas o áreas en la horticultura protegida donde no se podía sembrar tomate.
“Los productores de horticultura protegida agradecemos a la comunidad internacional, a la ONU y a la Semarnat, por los apoyos económicos que nos han dado para la adopción de esta tecnología”, expresó Cazares Castro.
Agregó que los resultados satisfactorios del laboratorio llevaron a la gestión de dos nuevos establecimientos en Guaymas y Hermosillo.