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La seguridad y economía Y ni como ayudarlo. Más allá de lo que podrían esgrimir sus paniaguados y paladines del gobierno del empleo ( de las balas ) y para que vivas mejor ( en otras latitudes ), aparecen cual dedo en la llaga, las calificaciones, que más bien, son descalificaciones, del organismo mundial, la OCDE ( Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, por sus siglas en inglés ) las que, aunadas a la última afirmación hecha por el escritor Javier Sicilia, dejan en claro lo difícil que resulta el tratar de defender lo indefendible. Pero, vamos por partes. Qué dice la OCDE y qué afirma el señor Sicilia: Por lo que respecta al organismo que dirige el mexicano, José Angel Gurría, fiel a su costumbre, desde que México ingresó a sus filas y cual si se tratara de un partido de oposición, otra vez, de nueva cuenta, descalifican el desempeño del gobierno de Calderón en materia de seguridad y economía. Del primero de los rubros, no hay mucho que alegar; en estos momentos que se escriben estos apuntes, los últimos diez minutos, para ser precisos, se habrán registrado las últimas 20 víctimas de la guerra sin fin y sin pies ni cabeza emprendida por Calderón, más por un intento de legitimar su gobierno que por limpiar la casa. O, como diría el viejo comercial de conocida firma emborrachadora;¡ 40 mil muertos no pueden estar equivocados!. Y es precisamente, en base a ello, que no hace mucho esfuerzo el escritor Sicilia para colegir, con todo el rigor que impone una verdad del tamaño del Estadio Azteca que el Estado Mexicano se le desmorona y se le va de las manos a Calderón. Y cito textual al poeta Sicilia: “El Estado como lo conocemos, es el que surgió desde la Ilustración, desde la Revolución Francesa, ha llegado a su fin tal como se concibió. Estamos frente a modificaciones históricas, estamos en un parteaguas histórico, de crisis de Estado. Ahora sí el Estado ya no está cumpliendo con su vocación, ya no le está sirviendo a los ciudadanos, se está desmoronando, se está construyendo algo nuevo que no sé claramente qué es, pero el Estado actual no está funcionando”. Y arremete sin lugar a la réplica: “Hay una queja en Europa y en México por la partidocracia, pero en Europa al menos hay estados democráticos, las instituciones funcionan; las movilizaciones de México se parecen más a las movilizaciones que se han gestado en Medio Oriente, porque son Estados podridos, estados criminales, encubridores, que dejan a los ciudadanos en manos de la delincuencia, que dejan las cosas en manos de policías y de militares que muchas veces son criminales”. En materia de economía, el panorama, pinta, por igual, un cielo gris, lleno de nubarrones en donde nos faltan dedos de la manos para contar la miseria que se extiende a lo largo del país, mientras cada día se levantan, por doquier los “pobretólogos”, aquellos que viven de la desgracia de la gente y que nos visitan cada tres años, en épocas de elecciones para venirnos a decir que ahora si, ya vamos por más progreso; que son el presidente del empleo, de la seguridad, el de la familia, el del obrero, gente como tú, pues. Las dos, lo dicho por Sicilia y lo relevado por la OCDE, son igual de contundentes y dolorosas, pero por igual, son un fiel retrato del rostro que muestra México ante el mundo: Contamos -dice la OCDE- con la peor calidad de vida, según el indicador para una vida mejor, el instrumento con el que el organismo mundial, mide el grado de satisfacción y bienestar de los habitantes de un pueblo. El primer lugar, es decir, en donde el gobierno si cumple con su pueblo, en donde sí hay calidad de vida para sus habitantes, es en Luxemburgo. Aunque claro, habría que destacar que éste pequeño país del centro de Europa tiene a su favor dos grandes ventajas que aquí en México ansiaríamos tener, también, aunque fuera por un sexenio. Te doy la más importante y por la que los mexicanos estoy seguro, estarían dispuestos a cambiar por lo que fuera; desde quedarse sin el liderazgo de la Gordillo o la desaparición de cualquiera de las dependencias federales: En Luxemburgo, el Duque -porque es Ducado, monarquía constitucional- quien a su vez es el jefe del gobierno, tiene la facultad de desconocer con un plumazo (aquí se confunden y a los candidatos los borran con un plomazo) a todo el parlamento -lo mismo que al gabinete, cuando las cosas no andan bien. Nada de plebiscitos ni referéndums, a la calle y punto ¡Ah, malaya! En segundo término, el gobierno de Luxemburgo tiene enfocadas sus baterías a favor de la integración económica, política y militar lo que le permite alcanzar el bienestar general para sus quinientos mil habitantes. FIERRITOS EN LA LUMBRE Sugerencias y comentarios; premiereditores@hotmail.com |
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