Ahora que la llamada Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, la FDA, está por obligar a los fabricantes de cigarrillos de su país para que en la caja en que se empacan lleven tétricas ilustraciones con cuerpos muertos, pulmones enfermos y un hombre con un respirador artificial, tendiente, desde luego a bajar el consumo y la  mortandad, víctimas del tabaco, sería muy bueno que se anexara un apartado en esas mismas cajetillas, -- a solicitud de nuestro gobierno—en donde se mostraran la cara de los miles de huérfanos y viudas que ha dejado el daño colateral de esa guerra que se produce con la criminal e indiscriminada venta de armas por parte de los voraces armeros gringos.

De igual manera, no estaría de más recomendarles que así como se pretende bajar el índice de fumadores, se emprendiera otra no menos intensa campaña dirigida a bajar el consumo de mariguana, coca y anfetaminas a sus no menos de cuatro millones de drogadictos con los que se compone el mercado de drogas más grande y boyante del mundo y que les arroja una ganancia de dos billones de dólares anuales,  el equivalente a 35. 7 veces la fortuna del fundador de Micosoft, Bill Gates y mucho más superior que  varias de las economías de algunos países de América Latina.

La campaña anti tabaco de los Estados Unidos se realiza en los momentos en que 221 mil estudiantes han sido diagnosticados con cáncer pulmonar, tan solo en lo que va de éste dos mil once y cuando se espera que 150 mil estadounidenses, entre mujeres y hombres, mueran por estas mismas causas a finales del presente año lo que lleva a pensar en lo necesario y urgente que resultan este tipo de medidas, sin embargo, siento que se deja de lado la campaña en contra de los drogas, cuyos devastadores resultados no solo atañen al pueblo gringo sino aquellos otros como el de México en donde tiene lugar la doble batalla intestina y que desangra al país; la que libran entre si las bandas del crimen organizado en busca de extender su sucio negocio y la que sostiene con ellos el gobierno mexicano con el aterrador costo ya descrito.

Y a propósito de daños colaterales y fallidos operativos, como el CONAGO 1 que tiene lugar en estos momentos, a estos habría que sumar el triple asesinato perpetrado ayer, en Veracruz, en perjuicio del periodista Miguel Angel López Velasco, su esposa y su hijo quienes fueron sorprendidos por un grupo armado, cuando dormían en el interior de su casa. Aquí en Sonora, donde también hace aire, no hace muchos días se lamentó también el asesinato del reportero Pablo Ruelas, en el municipio de Huatabampo, cuyo caso, por cierto, en un intento de minimizar el hecho, las propias autoridades lo desconocieron como reportero y por igual, salvo algunos colegas de Navojoa, no hubo quien diera la cara por el malogrado comunicador como si la labor periodística tuviera fecha de caducidad. El reportero, el periodista, señores, no se jubila y se es periodista las 24 horas del día y mientras se tenga un aliento de vida desde el momento mismo en que uno se casa con esto que alguien llamó alguna vez el perro oficio. A propósito de muy mala leche, el caso que está a punto de convertirse en un nudo gordiano para las autoridades, es el del asesinato del ganadero, socio de la empresa lechera, Lala, Carlos Ignacio Valdez Berlanga luego de que ayer apareciera colgado, de los barrotes de su celda, uno de los dos detenidos como presuntos autores materiales de su muerte.

Para acabarla, el ahora difunto, Luis Armando Jaques, era ni más ni menos que yerno del empresario lechero y por lo pronto, a reserva de lo que haya declarado, ya se llevó a la muerte toda la verdad en relación al asesinato que cimbró a la sociedad de la Laguna, en Torreón, Coahuila, sobre todo por las circunstancias en que tuvieron lugar los hechos.

FIERRITOS EN LA LUMBRE

Ahora resulta que a partir de la sesión plenaria que habrá de realizarse por parte del Congreso del Estado en Tubutama, este pequeño municipio será declarado libre de toda inseguridad y en un descuido, hasta en una de las comunidades más seguras de Sonora, según el decir del secretario de Seguridad en Sonora, Ernesto Munro.

Yo coincidiría con el ex diputado y ex delegado de la Semarnat, Munro Palacios solo si don Ernesto acordara darse una vueltecita por el lugar, solo y su alma, sin el operativo de guaruras con el que suele hacer sus recorridos por la entidad para comprobar la paz de los sepulcros que reina en Sonora. No, pues, así hasta yo. El que está que brinca de gozo es el titular de los Derechos Humanos en Sonora, Raúl Ramírez, a partir de la restitución que, a chaleco y por orden del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, acaba de hacer el Consejo Estatal Electoral de Sonora, en la persona de Hugo Urbina Báez, su cuatacho del alma. Otros que no caben de felicidad son el líder nacional del PAN, Gustavo Madero, el pre incipiente pre candidato de Calderón, Ernesto Cordero y su beatitud, Luis Felipe Bravo Mena, luego de las declaraciones hechas por Fox en días pasados el que asegura que el PRI viene por todo en este 2012 y que su partido, el PAN, habrá de morder el polvo tanto en las elecciones del Estado de México como la grande en la que estará en juego la Presidencia de la República.

Con esa clase amigos, para que quieren enemigos los del albiazul, los que, de todas maneras y pese a las fintas que hace el PANAL en Cajeme y buena parte del estado que insiste en la conformación de un equipazo de lujo con Eduardo Bours y Chuy Félix a la cabeza, no ceja en los preparativos para retener la alcaldía con cualquiera de los dos visibles precandidatos; Rodrigo Ramírez Rivera y la diputada. Eloisa Flores no obstante a que, desde Palacio Municipal se insiste en meter con calzador a Luis Alberto Plasencia al que ni por asomo fuman en la esquina que domina de Paliza y Comonfort de la capital del Estado.

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