Iniciaba la década de los setenta y en Cd. Obregón, como en todo el mundo, la rebeldía juvenil se expresaba en diversos tonos, con actitudes hippies o "fresas" disfrazadas de hippies, y a través de la música, el cine y el teatro.

En ese ambiente se montó la obra de teatro "Lodo", dirigida por Miguel Ángel Murillo Aispuro, fiel soldado del sistema priista, pero en aquel entonces un joven idealista e inconforme como aquellos que lo acompañaron en esta aventura.

"Lodo", decía la propaganda impresa, "llega a la médula de los problemas de la humanidad inclinándose más en los de nuestra juventud, que cruza por la época más criticada en la historia de todos los que habitamos el globo terráqueo".

Y agregaba:

"Lodo abarca los problemas de la juventud desde el punto de vista moral, psíquico y hasta el excesivo uso de drogas".

Ahora nos puede provocar risa el tono moralizante, pero en aquel entonces era muy tomado en serio no sólo por los participantes de la obra sino por el numeroso público que asistió a las funciones y llenó varias veces el teatro del Itson.

Los actores y personajes eran Francisco Félix (el Cliente), Antonio Bojórquez (Uno), Gustavo Ayala (Dos), René Padilla (don Ramón), Rolando Zayas (Barman), Gutberto Vivian (Taras), Miguel Ángel Díaz (Canas), Jesús Manjarrez (Nubes), Andrés Silva (Zurdo) y Miguel Ángel Murillo (Garto).

Las actrices: Adria González (Lety), Elsa Sánchez (Lucy), María del Carmen Mexía (Silvia) y Beatriz Elena Ortega (Anita).

La escenografía estaba a cargo de Getivy, el coordionador era Francisco Rojas y el encargado de sonido era Enrique Ávila.

Beatriz Ortega, que en esos años era la reina de la belleza del Itson, nos describe algo más sobre esta obra que seguramente recordarán los jóvenes obregonenses de la época:

"Como dato curioso", dice Beatriz, "te he de comentar que los boletos tenían un costo de $10.00 y para los estudiantes $5:00 y en aquellos años el teatro lo nombraban TEATRO AUDITORIO DEL INSTITUTO TECNOLÓGICO DE SONORA, me refiero a finales de las sesentas y principios de los setentas.

"Hacíamos presentaciones de hasta tres días y con éxito rotundo pues todas sus funciones contábamos con lleno total, es más hasta de más porque en las escalinatas también se sentaba la gente. Recuerdo que también nos presentamos en Navojoa, en Culiacan, Agua Prieta.

"Una de las presentaciones que hicimos aquí en Obregón fue especial para el dramaturgo Luis G. Basurto, pues el entonces Presidente Municipal de Cajeme Dr. López Árias, nos lo solicitó y fue muy emocionante para nosotros que al término de la obra haya subido al escenario para felicitarnos uno por uno. También el teatro rebasó su capacidad".