BARCELONA.- El Chelsea dejó fuera de la Liga de Campeones al Barcelona al empatar este martes con marcador de 2 - 2 (3 - 2 en el global), en un partido disputado en la casa azulgrana, el Nou Camp.

Aquí, en este pasto donde Pep Guardiola armó una escuadra invencible durante tres años, aquí donde se forjó la historia del mejor equipo del mundo tal vez en la historia del futvbol de clubes, sí, aquí donde todos esperaban ver pasar al Barca sobre el Chelsea para después viajar a Munich y disputar la final de la Champions... aquí cayó el Barca.

Y el rostro de Messi, casi a punto del llanto, era la mejor definición de esta derrota que viene después de la sufrida hace apenas tres días, aquí mismo, frente al Real Madrid, que los dejó prácticamente fuera de la Liga Española.

Dos derrotas dolorosas en menos de tres días, dos campeonatos que se le van al mejor equipo del mundo hasta hace una semana, dos llamadas de atención para Guardiola y su gente.

El partido contra el Chelsea fue dominado de punta a punta por el Barca, pero eso de nada le sirvió porque el Chelsea anotó cuando fue necesario hacerlo, primero para mantenerse arriba, con un golazo del lateral Ramírez, y después con el tiro de gracia que propinó el Niño Torres ya casi para terminar el partido y dejar a Messi y compañía desolados, lamentando las fallas que tuvieron.

Sobre todo el penalty que erró el propio Messi y que hubiera puesto al Barecelona casi en la otra orilla.

Pero hoy el Barca fue sólo un buen equipo, uno de los mejores del mundo, pero no el mejor, el invencible. Como había sido hasta hace poco.