En el transcurso de la semana recibí dos correos amistosos que contienen información macroeconómica que muestran el éxito económico del gobierno Neoliberal del PAN (Vicente Fox y Felipe Calderón).
 
Evidentemente los mensajes son una convocatoria a votar por el Modelo Económico “de este Partido Político”.  Mis gentiles amigos me invitan a votar por lo mismo para que las cosas sigan el mismo curso de los últimos años,  que de entrada apunto que son 30 porque el MODELO ECONÓMICO NEOLIBERAL que nos rige data de 30 y no de doce años.
 
 Me imagino que usted también,  lector, habrá recibido mensajes que contienen datos comparativos de inflación, deuda, déficit y otros conceptos macroeconómicos relevantes de las Administraciones de priístas y panistas durante el periodo 1982 – 2011, con los que supuestamente quedan evidenciadas la incapacidad de los primeros y la gestión milagrosa de los segundos.
 
Al respecto le aseguro que no hay nada más equivocado que juzgar diferente a unos y otros que han seguido la misma estrategia económica impuesta por los acreedores del país en 1983.  En términos estrictamente económicos,  los segundos son una continuación natural de los primeros.
 
Los resultados macroeconómicos de las cinco últimas gestiones son en términos generales muy insatisfactorias y lo anterior queda demostrado al revisar las cuentas de la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe,  ONU) que ya en sus últimos REPORTES ANUALES coloca a México en el último lugar de crecimiento económico,  por debajo de Haití,  El Salvador y Bolivia.
 
Más precisamente:  los dos últimos sexenios que ensalzan los mensajes que recibí apenas si logran rebasar el 2% de crecimiento económico en promedio anual y si involucramos el crecimiento demográfico, el registro de crecimiento económico es igual a cero. ¡12 AÑOS CON CERO CRECIMIENTO ECONÓMICO!
 
Por su parte, los presidentes priístas MMH,  CSG y EZPL también tienen un raquítico promedio de apenas 2.5% de crecimiento anual en los 18 años del periodo 1983 – 2000.
 
Así que sacando cuentas, los mexicanos que requerimos un crecimiento mínimo de 6% en promedio anual, hemos malgastado 30 años en gobiernos Neoliberales mediocres.
 
Los correos a que hago alusión festinan que la política económica de las últimas dos Administraciones panistas han mantenido bajo control la inflación,  nos han dado un Tipo de Cambio estable y nos han librado de devaluaciones abruptas,  de megadevaluaciones. Y por supuesto destacan como grandes logros el monto actual de reservas internacionales y los registros de Inversión Extranjera.
 
Pero es oportuno establecer que se ha llegado a estos resultados macroeconómicos por la aplicación ININTERRUMPIDA de una Estrategia Macroeconómica que nos impusieron el FMI, el BM y el Departamento del Tesoro de los EUA en 1983 como condición para “renegociar” la Deuda externa.
 
Esta efectivísima ESTRATEGIA ECONÓMICA NEOLIBERAL que se conoce como CONSENSO DE WASHINGTON está constituida por 10 políticas de observancia obligatoria hasta que la Deuda externa haya sido pagada en su totalidad.
 
Una cuestión que debe quedar muy clara por su importancia para el análisis de este escrito: EL CONSENSO DE WASHINGTON implica la aplicación de una Política de Contracción Económica.
 
Lo anterior lo apunto porque las evidencias en el trato de la Crisis Económica muestran que aplicar la POLÍTICA DE CONTRACCIÓN ECONÓMICA es precisamente lo QUE NO SE DEBE HACER.  Esta política que consiste en la AUSTERIDAD ha retardado la solución en la Unión Europea,  al igual que la retardó en los años de la Gran Depresión en los EUA.
 

CONCLUSIONES:
 
Uno: El manejo macroeconómico del país está “secuestrado” por las agencias financieras multinacionales que obligan a aplicar las políticas del CONSENSO DE WASHINGTON.
 
Dos:  Las políticas del CONSENSO DE WASHINGTON iniciaron su aplicación ininterrumpida en 1983 y continúan vigentes en 2012 y
 
Tres:  Para efectos de la aplicación del CONSENSO DE WASHINGTON, no importa que Partido Político nacional gane o pierda la presidencia de la república.
 
De lo anterior se desprende  que el apócope PRIAN (suma de PRI+PAN) sea correcto en lo que al manejo de la economía nacional se refiere.
 
Lo que me parece una omisión imperdonable en los correos que celebran  las “Conquistas del PAN que hicieron posibles los gobiernos del PRI”,  es que no hagan ni una sola alusión al enorme costo social que implican dichas “conquistas”.
 
Los datos macroeconómicos actuales son consecuencia de la aplicación sostenida en el tiempo, de una política infame operada por extranjeros para saquear nuestro país. Esto es en la realidad el CONSENSO DE WASHINGTON.
 
Lo más triste es que los depredadores extranjeros hacen una simbiosis de corrupción con actores nacionales que es imperativo extinguir si los mexicanos aspiramos a una democracia real y a un sistema económico que ofrezca oportunidades a todos y premios a los que realmente los merezcan.
 
México vive una situación paradójica: tiene un gobierno aparentemente  sano y una sociedad gravemente enferma de desesperanza.
 
La caída de la inflación, el control del gasto público, la apertura del mercado, la Inversión Extranjera y las reservas internacionales que vanaglorian los gobiernos del PRI y del PAN tienen altísimo precio y sabor muy amargo.  Han generado pobreza, desempleo, violencia, marginación y éxodo de millones de mexicanos. Lo peor es que no se vislumbra ninguna esperanza si no se opera un Cambio, un cambio real, intencionado, consensado y bien dirigido en la conducción del país.
 
México requiere con urgencia un Líder.