Un empleado de una casa de empeño fue extorsionado mediante una llamada telefónica.
Le dijeron que lo tenían vigilado y que si no depositaba una fuerte suma de dinero lo iban a matar.
Ramón Felipe Pineda, empleado de la casa de empeño BEC ubicada en calle 5 de Febrero frente al Mercado Municipal, recibió la llamada intimidante de sujetos desconocidos que le decían estar a bordo de una camioneta Ford Lobo color blanco.
Al asomarse a la calle vio una camioneta con esas características y, asustado, siguió las instrucciones de quien le hablaba por teléfono.
Depositó 11 mil 500 pesos a la cuenta 554490034 en la sucursal Banamez de 5 de Febrero y Guerrero, y después de eso superó el miedo y decidió llamar a la policía preventiva.
Acto seguido el lugar se llenó de patrullas, lo que llamó la atención de las personas que a esa hora del mediodía acudían al centro de la ciudad y pensaron que se trataba de algo más grande.
Sólo fue el susto, el depósito de los 11 mil 500 pesos y la búsqueda infructuosa de los extorsionadores.