La administración de la Laguna del Náinari no estará a cargo de una empresa privada sino de un organismo paramunicipal denominado Promotora Inmobiliaria de Cajeme, aclaró Pablo Beltrán.
El objetivo es hacer autosostenible el manejo de la Laguna y quitarle al Ayuntamiento la carga financiera que implica el mantenimiento del espacio recreativo más popular de la ciudad, explicó el secretario del Ayuntamiento.
La Promotora Inmobiliaria de Cajeme fue creada en la década de los noventa pero hasta hoy se le da una aplicación práctica al asignarle el manejo de la Laguna, añadió el funcionario.
Para garantizar el éxito de este organismo, su directivos serán nombrados por tres años a la mitad de la administración municipal, ello impedirá que los cambios políticos influyan sobre las decisiones internas de la paramunicipal.
El primer director, Tomás Mendoza, permanecerá en su cargo cuando menos hasta el primer año y medio del gobierno municipal que encabece Rogelio Díaz Brown.
Dicha medida deberá ser respetada por el npróximo gobierno pues corresponde a un reglamento aprobado por los diversos partidos representados en el Cabildo cajemense.
Al igual que Oomapasc y otras paramunicipales, la Inmobiliaria tendrá una administración autónoma y contratará a otras empresas y prestadores de servicios para la limpieza y el mantenimiento de la infraestructura de la Laguna, incluidas las fuentes danzantes.
Respecto a dichas fuentes precisó que su mantenimiento no será una carga onerosa para los expendedores de cocos pues la Inmobiliaria cubrirá los gastos con los ingresos obtenidos de todos los negocios instalados en el área, como la tirolesa, la renta de lanchas y los restaurantes que allí se instalarán dentro de unos meses.