Desde que Esther Rivera Robles tiene memoria, se recuerda así, en una silla de ruedas debido a la polio que contrajo cuando era bebé y la dejó inmóvil de la cintura hacia abajo.
Sin embargo su condición física no fue obstáculo para lograr lo que muchos deportistas anhelan: Participar en los máximos eventos del mundo.
Y Esther, a sus casi 47 años de edad, está por partir a sus terceros Juegos Paralímpicos. Los primeros fueron en Atenas 2004, le siguió Beijín 2008 y ahora prepara las maletas para Londres 2012.
“Tengo la fortuna de tener el récord paralímpico, récord mundial y récord parapanamericano en mi categoría que es F53, en Atenas obtuve la medalla de oro y record paralímpico, récord mundial aún vigente”, declaró durante su entrenamiento.
El lanzamiento de jabalina es el deporte que le ha dado gratos momentos desde que empezó a practicarlo a sus 22 años de edad.
A sus triunfos en el deporte se suman, dice, los que ha tenido como mujer al haber logrado formar una familia a lado de Cecilio Castro y sus tres hijos: Álvaro, Iván y Cecilia Esther.
Desde hace meses, Esther se prepara para Londres 2012 en el Centro Paralímpico que lleva su nombre, en la calle Jalisco.
Aunque sabe que podrían ser sus últimas olimpiadas con difíciles contrincantes de países como Brasil, China, Alemania y Rusia, hará su mejor esfuerzo para lograr una medalla más de oro en unos juegos paralímpicos.
“Me da mucha satisfacción que tengamos aquí un lugar donde entrenar y no nada más para mí, ya que podrían ser mis últimas olimpiadas debido a mi edad, pero vienen muchos niños detrás de nosotros y es bueno dejarles estos logros para que salga otra Esther Rivera, otro Luis Zepeda”, dijo.
Para adaptarse al clima de la capital inglesa, Esther emprenderá el viaje este 10 de agosto, un mes de anticipación al día de su competencia que será el 3 de septiembre a las diez de la mañana.
Desde Obregón, su familia, sus amigos y todo el público verá en Esther una prueba palpable del triunfo de la voluntad.