En el caso del arraigo a judicial de Gerardo Fernández Félix la Procuraduría de Justicia del Estado (PJE) actuó con estricto apego a la ley, señaló Tatiana Unger.
Por esa razón, no es necesario que el procurador Carlos Navarro Sugich ofrezca disculpas a la familia Fernández Félix, expresó la vocera de la PJE.
Aunque el Procurador quien tiene la úiltima palabra en este asunto, reiteró Unger, es evidente que no cometió ninguna acción ilegítima por la cual deba disculparse.
La vocera visitó esta ciudad para presentar a los detenidos por el robo de una tonelada de camarón, pero el mayor interés de los reprorteros era conocer la respuesta del Procurador ante la petición del abogado defensor de la familia Fernández para que se disculpara con ellos.
Y aunque estaba anunciada la visita del propio Procurador, a última hora se informó que éste no había podido venir a Cajeme por lo que en su lugar hablaría Tatiana Unger.
Presentan a detenidos
Ante los medios de comunicación fueron presentados los seis sujetos involucrados en el robo de dos camiones cargados con diez toneladas de camarón.
Los detenidos son: José Ángel Ramos Pérez, alias "El Jojo", de 37 años de edad, con domicilio en la colonia Morelos; Luis Eduardo Ramírez Chacón, alias "El Chirris", de 25 años de edad, con domicilio en la colonia Morelos; Daniel Alfonso Félix Agüero, apodado "El Dany", de 24 años de edad, con domicilio en la colonia Ladrillera; Jorge Alberto Castillo Soto, de 42 años de edad, con domicilio en San José de Bácum; Jesús Manuel Peraza Moreno, alias "El Chencho"; y Rubén Francisco Machado Acosta, alias "El Cobi".
A dichos sujetos, dijo, se les ejecutó orden de aprehensión por los delitos de robo agravado con los elementos típicos de ejecución con violencia en las personas por dos o más personas, respecto de vehículo de propulsión mecánica; privación ilegal de la libertad y asociación delictuosa, por lo que hoy mismo serán ingresado al Cereso local, donde quedarán a disposición de un Juzgado Penal.
Fue el pasado 4 de octubre del año en curso, cuando ante el Agente del Ministerio Público del Fuero Común, con sede en Bácum, se presentó el apoderado legal de una empresa para denunciar el robo de dos de sus camiones. El robo se llevó a cabo en el momento en que los camiones salían cargados con 10 toneladas de camarón de una granja acuícola ubicada en San Ignacio Río Muerto, los cuales iban con destino a los Mochis, Sinaloa.
Dichos camiones, siendo éstos tipo tortón, de color blanco, uno de ellos modelo 1989 y el otro 1991, fueron encontrados abandonados el 5 de octubre en el kilómetro 7 a 100 metros al margen del Poniente del canal bajo, en la población de Esperanza. Uno de ellos tenía la carga completa de camarón y el otro estaba vacío.
La Vocera de la PGJE manifestó que al iniciar con las indagatorias, los agentes lograron establecer la identidad de los presuntos, mismos que lograron detener en diversas diligencias, los primeros días de noviembre, los cuales fueron puestos a disposición del Representante Social y al ser cuestionados sobre los hechos aceptaron su participación en el ilícito.
En su declaración ministerial, dijo la funcionaria, los hoy detenidos narraron que el día de los hechos, pasado el medio día, esperaron en la entrada de la playa Esperancita a que salieran los camiones cargados de crustáceo con la intención de robarlos. A la altura de la calle de terracería, que topa con la 900, interceptaron los camiones atravesando dos vehículos, siendo éstos un pick up S-10 y un PT Cruiser y amenazaron a los choferes con dos armas de fuego que llevaban consigo.
Los presuntos narraron que bajaron a los choferes de los camiones, los subieron a uno de los vehículos y se los llevaron hacia el monte donde los tuvieron amarrados hasta las cinco de la tarde aproximadamente, para dar tiempo a que los camiones llegaran al lugar donde los guardarían, siendo este un rancho que estaba ubicado en la población de Cócorit.
Al tratar de introducir uno de los camiones al rancho éste se les atascó, por lo que lo descargaron y colocaron las jabas con camarón debajo de un tejaban que se encontraba en dicho predio, posteriormente se llevaron los camiones, uno cargado y otro descargado y los dejaron abandonados en despoblado.
Los hoy detenidos narraron que al día siguiente trataron de vender el camarón en diferentes congeladoras, pero como se sabía que se había cometido el robo de los camiones cargados del crustáceo, no pudieron colocarlo. Por tal motivo tiraron una parte y la otra la enterraron en el mencionado rancho.
Durante las indagatorias los agentes de la PEI realizaron una serie de diligencias en las que se obtuvieron evidencias de la participación de dichos sujetos en éstos ilícitos y además se logró recuperar una de las armas que fueron utilizadas en el mencionado robo.