ÁLAMOS.-. El Festival Alfonso Ortiz Tirado incluye desde hace unos años una noche de concierto para los estudiantes de la Licenciatura en Artes opción Canto de la Universidad de Sonora en lo que es una muestra más de la madurez y el alcance de este festival.

Brindándoles un espacio dentro del programa y en el escenario principal del festival de canto más importante del país, los estudiantes de la Universidad de Sonora tienen una verdadera práctica profesional.

Pero esta noche de concierto no es el único incentivo que ellos tienen. Por nueve días, todos los maestros y alumnos de esta carrera están aquí en Álamos para además de escuchar a los grandes artistas tener acceso especial a ellos y poder preguntarles o pedir algún consejo, así como también poder estar durante sus ensayos. Además, este año se incluyeron clases magistrales y en este día fue con Horacio Franco.

Previo al inicio del concierto y para completar esta fiesta universitaria, el gobierno del Estado otorgó el reconocimiento Maestro Sonorense 2013 a la doctora en musicología Leticia Varela Ruíz por su extensa labor docente y por su trabajo investigativo sobre la música indígena sonorense. Fundó y dirige la Escuela Superior de Música de la Universidad de Hermosillo y es consultora fundadora del Centro Tomatis Hermosillo.

Durante la ceremonia de entrega del reconocimiento, Benjamín Anaya, presidente municipal de Álamos, afirmó que el FAOT no solamente deja en Álamos una importante derrama económica sino también algo más valioso como lo es el aprendizaje para apreciar más las manifestaciones culturales, algo que se logra a través de personas como la homenajeada esta tarde.

Quienes participaron en el concierto “Noche de la Universidad de Sonora” fueron las sopranos Valeria Quijada, quien cursa actualmente el quinto semestre, Cesia Olivares de décimo, y Nadia Lamadrid quien en mayo concluyó su licenciatura;  estuvieron acompañadas en el piano por Héctor Acosta, docente de la Licenciatura en Artes en la UNISON.

A pesar de ser un evento musical de jóvenes estudiantes, logró atraer a mucho público que disfrutó del concierto. El repertorio estuvo conformado por canciones y arias de compositores románticos y modernos, siendo algunas de ellas muy demandantes técnica y/o musicalmente.

Enhorabuena por estas cantantes estudiantes y por esta acertada apuesta de los organizadores del FAOT por los jóvenes. La cosecha vendrá luego.