A unas les prometieron apoyos económicos para proyectos productivos, a otras las invitaron a respaldar a sus dirigentes; otras más convivieron en la Casa Club del Itson, mientras que algunas más asistieron a un taller de capacitación para mujeres...
Aquí y allá, mujeres madres, trabajadoras, esposas, novias, mujeres maduras y jovencitas, mujeres indígenas y de la ciudad, empleadas de maquiladoras, empresarias y mujeres de posición económica desahogada... todas fueron objeto de elogios, reconocimientos, apapachos y buenos deseos al celebrarse el Día Internacional de la Mujer.
La fecha fue instiuida para conmemorar a las mujeres que el 8 de marzo de 1857 protestaron contra las condiciones en las que desempeñana su trabajo en una fábrica de textiles en Nueva York.
Desde entonces, pero con mayor vigor en los años recientes, se celebra este día a las mujeres en la mayor parte del mundo, incluido nuestro país, y por supuesto nuestro municipio.
En la Biblioteca Pública, la Red de Mujeres por la Armonía y la Paz impartió un taller y realizó un evento cultural para reflexionar sobre el papel que desempeña la mujer como agente de cambio y sostén de los valores que deben enfrentar a una sociedad contaminada por la violencia, donde ellas mismas son víctima recurrente.
En el CEN del Itson, la exregidora Carmen Guerrero reunió a decenas de mujeres indígenas, principalmente, y mujeres de la ciudad para hablarles de las bondades que tiene la política social del presidente Enrique Peña Nieto, en particular de los programas para apoyar los proyectos productivos con enfoque de género.
El presente es promisorio en esta nueva administración federal, asegura Guerrero, quien hace apenas un año sufrió la discriminación sexista pues, aifrma, por su condición de mujer le cerraron el paso a la candidatura del PAN por una diputación local.
Mientras tanto en la sede de la Ugocp, las mujeres de la organización que dirige Miguel Ángel Castro Cossío reeligieron a Margarita Cabrera Solano como dirigente de la Federación Nacional de Mujeres.
A sus compañeras, Margarita les dijo:
“En nuestro país, las mujeres sufrimos de manera directa las consecuencias de las crisis económicas y sociales que se presentan de manera recurrente”.
A las mujeres, expuso, le arropan de todos los males: la violencia intrafamiliar, la miseria y la pobreza.
Más allá, en la Casa Club del Itson, la presidenta del DIF Cajeme, Susana Terminel de Díaz Brown, presidió la reunión con voluntarias de este organismo.
Elegantes todas compartieron su Día con la satisfacción de participar en los eventos de asistencia social.
Mientras esto sucedía en el centro de la ciudad, por rumbos de Villa Bonita, en el Parque Industrial y en algunas colonias del sur, miles de mujeres trabajaban arduamente en las maquiladoras donde dejan parte de su vida por más de ocho horas de trabajo diarias y un sueldo que no les alcanza para cubrir las necesidades elementales de sus familias.
Para ellas no hubo celebración, tampoco para los cientos de muchachitas que laboran los negocios comerciales y aquellas que trabajan como sirvientas a cambio de casi nada.