La actriz de Mujeres desesperadas y una de las latinas más deseadas de Hollywood, Eva Longoria, se casará mañana con su novio, el jugador de baloncesto francés Tony Parker.
Pero no lo hará en una ceremonia cualquiera. A su lado, la espectacular boda italiana de Tom Cruise y Katie Holmes parecerá modesta.
Para empezar, el sencillo escenario del enlace será la iglesia de Saint-Germain-l'Auxerrois, conocida como la capilla de los reyes de Francia y situada al lado del museo del Louvre.
Poco después, el banquete congregará a los más de 200 invitados en la localidad de Maincy, al sureste de París, donde la pareja ha alquilado el castillo de Vaux-le Vicomte.
El edificio es una espectacular construcción del siglo XVII, que ha servido de escenario para una larga lista de películas como María Antonieta, de Sofia Copola; Vidocq, El hombre de la máscara de hierro o Valmont. Los fastos matrimoniales comienzan hoy mismo con la ceremonia civil, que oficiará el alcalde de París, Bertrand Delanoe, en persona.
Con tanto lío, no es de extrañar que la actriz estadounidense haya estado de los nervios durante los últimos meses.
Consciente del estrés que atacaba a su novia, el jugador de los San Antonio Spurs decidió darle una sorpresa esta semana, con motivo de la celebración del 4 de julio. Recogió a su prometida en helicóptero y la llevó hasta la abadía del Mont Saint Michel, en Normandía. Pocos días antes, ambos habían disfrutado de una despedida de solteros conjunta en la localidad francesa de Saint Tropez.
Longoria, de 32 años, y Tony Parker, de 25, sellan así una relación de casi tres años, que los medios de comunicación del corazón han explotado extensamente. Se podría decir que el único secreto que aún guarda celosamente esta mujer desesperada es su vestido de novia, del que aún no se conoce un detalle.
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