Nissan presentará vehículos equipados con un detector de alcoholemia. El que maneje deberá soplar y si la máquina registra un nivel de alcohol en la sangre superior al tolerado por la ley, el auto no se prende.
La firma de automóviles japonesa Nissan comenzará a probar vehículos especialmente equipados para no arrancar si el conductor está borracho, en un intento por evitar los accidentes de tránsito que genera el alcohol al volante.
Los nuevos coches estarán equipados con un detector de alcoholemia integrado. Antes de arrancar, el conductor deberá soplar. Si el aire expirado contiene una cantidad de alcohol superior al tope legal, el motor se apagará automáticamente.
Hasta el momento, ya son comercializados en varios países, sobre todo en Suecia y Estados Unidos, aparatos que miden el alcohol a través del aliento y se niegan a arrancar el coche.
Según informó la empresa, antes de ser comercializado, el automóvil será probado en distintas regiones de Japón, en conjunto a los gobiernos locales.
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