CD. DE MÉXICO.- Francisco Villa Bustamante, líder comunero de Los Mochis, Sinaloa, anunció este lunes que tras 17 años de conflictos agrarios sin resolver, campesinos provenientes de localidades cercanas a esta ciudad plantearon la posibilidad de formar un grupo de autodefensa.
Debido a la inseguridad que viven en sus comunidades y ante la nula respuesta de las autoridades a las querellas que han presentado desde 1997, Villa Bustamante explicó que diversas comunidades indígenas han decidido crear una asamblea local para enfrentarse a la incapacidad de las autoridades para defenderlos de la inseguridad que azota en la zona.
De acuerdo con la prensa local, el líder comunero de Los Mochis informó que será el próximo 2 de febrero cuando los comunitarios se reunirán para la conformación de la asamblea en la que se constituirá formalmente la guardia comunitaria.
Francisco Villa externó que los comuneros no incurren en afrenta alguna a la ley, puesto que se basa en el artículo segundo, apartado A, fracción 2 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
HAY CONDICIONES A MODO
En Sinaloa las condiciones están dadas para que pronto haya grupos de “autodefensa” como ocurre actualmente en Michoacán y Guerrero, advirtió el doctor e investigador de la de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Gerardo de la Fuente Lora.
Esta situación se prevé ante la falta de democracia, EL hartazgo social por la ineficiencia de los gobernantes y las presiones internacionales, aseguró el catedrático.
Previo a su ponencia “La violencia, Cuerpo e Identidad”, fue claro al manifestar que Sinaloa ha seguido cada paso para llegar a esos extremos. “Seguramente sí (ocurrirá en la entidad un fenómeno como el de Michoacán). Aunque Sinaloa ha logrado estabilizar la violencia; las presiones internacionales ocasionarán que se salga de control”, dijo.
–¿Cuáles son los pasos que tendría que dar Sinaloa para llegar a esos extremos?
–Yo creo que ya los ha dado bastante bien. Mientras no haya democracia en el viejo sentido: contar los votos, autoridades independientes, pluralismos reales, no simulaciones como las que hemos tenido en el país; es la manera de resolver lo que el sistema político no resuelve.
Para tal fin, expuso, los sinaloenses experimentarían un alto nivel de hartazgo de la falta de democracia y de la ineficiencia de sus gobernantes.
“Se va volviendo cada vez menos funcional el arreglo: cada vez se atienden menos cosas, cada vez hay más fallas. No tomar en cuenta a la gente es ineficiente”. Esta situación, agregó, alcanzaría no sólo a Sinaloa, sino a otras entidades, y también se detonaría ante la falta de democracia.
“Michoacán es el inicio de una serie de movilizaciones extrañas aparentemente muy caóticas, pero que ocurrirá por todas partes mientras no haya realmente democracia, y participación abierta a la sociedad civil, entonces enfrentaremos ese tipo de movimientos”, advirtió.
“Se debe dejar que la gente participe, tenga autonomía, se organice, que se autoorganice; en fin, las cosas elementales de la democracia”. Sin embargo, consideró erróneo pensar que la sociedad buscará enfrentarse al Estado. “El Estado estaría mezclado en todos los grupos que se encuentran ahí (Michoacán) de diferentes formas. Es primordial”.
Respecto al tema del narcotráfico en Sinaloa, consideró necesaria una solución global, abierta y cultural. “Desde mi punto de vista la solución pasa por la legalización de la producción de la mariguana por lo menos; vemos que en Estados Unidos ya se está legalizando, y junto con eso una atención cultural e integral en todos los aspectos sociales”, dijo.
Durante su ponencia, De la Fuente Lora dio a conocer que toda violencia que perdura tiene el apoyo del Estado.