CABORCA.- Montado en su burro "El Tocayo" tomó los caminos de asfalto, desde Tijuana hacia el sur del país, con la mira de recorrer paso a paso la geografía nacional llevando su mensaje de paz y esperanza contra la violencia que impera en el país.

Es Rubén Ruiz Vega, exmarine, chicano que combatió en la guerra bajo la bandera de Estados Unidos, hoy convertido en un moderno Quijote (o Sancho, por lo del burro) que con su mensaje de paz quiere combatir a los gigantes de la violencia y desfacer los entuertos de la corrupción gubernamental.

Salió de Playas de Tijuana y ya había cruzado más de 500 kilómetros: Pasó por Tecate, la Rumorosa, Mexicali, San Luis Río Colorado, pero al llegar a territorio sonorense su burro “El Tocayo” fue atropellado por un trailer desconocido. Fue este Miércoles de Ceniza y desde ese día el ex marino se encuentra desconsolado y pide ayuda llorando para conseguir otro burro y seguir su travesía.

Comentaba en su cuenta de facebook antes de que mataran al burro en Sonora:

“El motivo de la caminata es despertar al pueblo mexicano para que tomemos lo que es nuestro por herencia de los grandes héroes de nuestro pasado. Les pido que por favor vuelvan a creer, aunque hemos sido traicionados en el pasado nunca dejemos de luchar. Pues ahora nos llegó el momento de levantarnos pacíficamente en unión y tomar lo que no es necesario pedir. Escuche bien Ejército Mexicano, Policía Federal, Estatal, Municipal, Ministerial, ustedes desde este momento no rinden cuentas a ningún funcionario público que no sea el pueblo porque aquí quien da las órdenes y manda es el pueblo mexicano. Quien financia mi viaje es el pueblo y por lo mismo me auto nomino su representante. Tu trabajo como servidor público es servir y ponerte a nuestras órdenes sea lo que sea que ocupemos harás lo necesario para asegurar que lo obtengamos. Soy hijo del pueblo, hombre de Palabra, Honor y Lealtad a la patria. Solo el pueblo puede salvar al pueblo y solo el pueblo organizado puede salvar a la nación... porque el cambio no está en los funcionarios públicos sino en cada uno de nosotros.. Hoy es cuando y no quiero que nadie se me raje, porque México no tiene ni un solo cobarde, sin levantar ni un solo dedo en violencia MEXICO YA ES NUESTRO, NO LO VUELVAS A SOLTAR Y EXIGE RESPETO, AL BRINDAR EL MISMO. Con todo respeto que se merecen, VIVA MEXICO C!!"

Rubén  Ruiz Vega montado en "El Tocayo" tenía la intención de recorrer con una bandera mexicana y de la paz la distancia desde Tijuana hasta el Distrito Federal. El accidente sobrevino después de recorrer más de 500 kilómetros cuando la tarde noche de ese Miércoles de Cenizo, detuvor su marcha para descansar en un paraje entre el tramo Sonoyta-Caborca.

Su fiel compañero se desató de la cuerda con la que estaba atado a un árbol y en un juego inocente por disfrutar de la libertad, cruzó la carretera donde fue impactado por un tráiler que en ese momento cruzaba por la zona.

Ahora Riubén se encuentra en la heroica Caborca donde dijo al reportero de Ariete:

“Grite de impotencia y dolor al ver que mi gran amigo había muerto en un segundo... Tuve que entender que ya no estaba y pensaba en regresarme o quedarme en ese lugar, pero luego de algunas horas tomé la carreta donde llevo mis víveres y la jaé por 64 kilómetros hasta llegar a Caborca”.

“No pude creer lo que había pasado porque Yo lo tenía capacitado para que entendiera, tal es así que con solo decirle que caminara por la orilla de la carretera, él me hacía caso, Yo siempre me mantuve entre él y los tráiler, la mayor parte del trayecto, Yo caminaba y él solo jalaba la carreta de nuestro viaje; siempre pensé que si algo sucedía a mí me tocaría el accidente no a él, pero nunca pensé verlo morir”, irrumpe la plática al cerrársele la garganta por el dolor de haber perdido a su gran amigo.

Asegura que no sabe qué hacer, pero está consiente que su compromiso es mandar un mensaje y levantar la bandera de la Paz por los mexicanos, por eso pide a los caborquenses o a los ciudadanos del mundo que le ayuden a terminar esta encomienda, ya sea con una carreta más liviana que le permita jalar sus pertenencias o con otro burro que alguien le quiera donar.

"Jamás permitiré que le vuelva a suceder algo a un animalito, pero no se trata sólo del burrito ni de mí, se trata que las demás personas tomen conciencia a través de esta travesía de la necesidad de luchar por la paz de este país que está lleno de maravillosos personajes y lugares, que necesitan tener tranquilidad, y esa es mi misión en esta vida, después de participar en guerras, es necesario que alguien haga conciencia y creo que de esta forma puedo llamar la atención de los mexicanos".

Rubén estuvo durante 8 años en la marina de Estados Unidos y en cuatro ocasiones participó en acciones de la guerra contra Irak y una vez en Afganistán, por esa experiencia se dio la oportunidad de conocer países que están muy bien organizados con solamente petróleo y no tienen más que sola arena: México es un país rico en recursos por todas partes, pero es necesario tomar conciencia; es urgente tener la Paz y él quiere llamar la atención a través de un viaje hasta el centro del país.

Planea llegar al D. F. dentro de 5 ó 6 meses, gracias a las aportaciones que recibe de la gente, pero sobre todo lo apoya con palabras de aliento para poder cumplir su misión de paz.

Quien desee apoyar a Rubén para que termine su viaje de miles de kilómetros pueden comunicarse al 637 1061025 con Marco Antonio Osuna en la ciudad de Caborca y nos adelanta que el próximo lunes estará boteando sobre la calle 8 y la avenida “N” en busca de obtener algunos dineros para ver si pude comprar otro asno que le ayude a seguir su viaje, llegar al D. F. y dejar en la conciencia de miles de mexicanos la urgencia de unirnos por la paz y la esperanza de un país mejor, libre de violencia.