Todos los aspirantes a una candidatura y cuando menos los dos partidos mayoritarios, el PRI y el PAN, se han enfrascado en una campaña inútil y demagógica para asegurarnos a los sonorenses que gracias a ellos tendremos energía eléctrica más barata.
Sin embargo esta posibilidad será efectiva cuando menos dentro de dos años, y no por gestión de los candidatos, sino por las leyes de la economía.
Ya lo dijo el director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Enrique Ochoa Reza: Será en un promedio de dos años cuando empiecen las reducciones en el costo de la energía eléctrica,
En entrevista con los medios de comunicación, el funcionario indicó que el primer reto es cambiar el combustóleo, combustible cuatro veces más caro que el gas natural y 68 por ciento más contaminante.
Para ello, abundó, se requiere infraestructura de gasoductos y nuevas centrales de ciclo combinado.
“A partir de la aprobación de la reforma energética y con toda la construcción de la infraestructura que nos permita sustituir el combustóleo por gas natural, esperamos ver en dos años beneficios concretos”, expuso.
Entre los compromisos y beneficios de la reforma energética está la reducción de los costos de la energía eléctrica, lo que se constituye al sustituir el combustóleo por gas natural e invertir en reducir pérdidas en las redes de transmisión y distribución.
Y otra advertencia: La reducción de los precios no será drástica, como quisiera el consuimidor, sino apenas perceptible.