El paso de Henriette (Enriqueta, en español) por Ciudad Obregón dejó una gran cantidad de árboles, anuncios, techos y estructuras que cayeron por el embate del viento.
También hubo calles que se abrieron en enormes baches, colonias inundadas y otras donde el suministro de agua potable fue interrumpido.
Sin duda el edificio que más resintió los efectos de este meteoro fue el del hotel Fiesta Inn, recién inaugurado.
Desde la misma tarde del miércoles cientos de persona en automóvil o a pie han pasado por el crucero de Miguel Alemán y Cajeme para ver de cerca cómo quedaron las paredes de tabla roca derruidas por el agua y el viento.
Un duro golpe para una empresa que hizo con una fuerte inversión de dinero y en la cual labora un importante número de cajemenses. |