Cuando se anunció el descubrimiento de un monstruo en la comisaría de Esperanza, se invitó a varios reporteros para que acudieran al lugar donde se encontraba dicho monstruo.
Pero varios compañeros expusieron una serie de pretextos para no ir al lugar de los hechos.
A unos les dolía la espalda, a otros se les hizo tarde, uno más argumentó que tenía una entrevista pendiente... y así, sobraron los pretextos para no encararse con el monstruo.
Algunos incluso dijeron que tenían que cubrir una narcoejecución en vivo por lo que no tendrían tiempo para concoer al monstruo, y menos ahora que se acerca el Halloween.
Ya por la tarde, al enterarse que se trataba de un monstruo de Gila, "un poco más grande que una cachora", entonces sí los reporteros se animaron a conocer al infeliz animalejo cuya especie está en proceso de extinción. |