CD. DE MÉXICO.- A su regreso de Río de Janeiro, la arquera mexicana Aída Román culpó a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) y el Comité Olímpico Mexicano (COM), de que no se logren los resultados que se esperaban en la justa brasileña debido “al divorcio” que hay entre las autoridades “y nosotros estamos en medio”.
La capitalina quedó lejos de la medalla de plata que ganó hace cuatro años en Londres, al no cumplir con las expectativas en lo individual como tampoco por equipos, sin embargo, defendió la postura del calvario que tienen los deportistas de alto rendimiento por las diferencias entre Alfredo Castillo, director general de la Conade, y Carlos Padilla, presidente del COM.
Sobre Castillo, la arquera reprochó que prefirió llevar a “alguien más querido” a Río de Janeiro --la presenta como acompañante con gafete oficial--, en lugar de médicos y preparadores que tanto requieren los seleccionados, ya que algunos no tienen acreditaciones oficiales para darles asistencia directa en el lugar de competencia.
“No es alguien que esté inmerso en el deporte y es difícil que pueda hacer una buena administración. Sí tuvimos algunos apoyos, pero a cuentagotas y desafortunadamente las federaciones peleadas con unos y otros.
“Nosotros fuimos a Brasil a hacer nuestro mejor esfuerzo, cada director trae sus propios proyectos, empiezan a poner muchas cosas en medio, al deportista lo dejan solo, no puedes hacer un plan de cuatro años y 10 meses”, fustigó la arquera que se tomará un descanso de 12 meses y definirá su futuro para el siguiente ciclo.