Le comenté y luego le pregunté a un ampayer:

“Así como el pelotero no cuenta con protección (seguridad) social al momento de su retiro, ¿sucede lo mismo con los ampayers?

Su respuesta, tajante, fue: “No es mi caso”.

Y le insistí en esa cuestión:

Pero, ¿y en general?

Y expresó: “No sé”.

Caray.

Que feas respuestas y actitud.

Por respeto, no le diré de quien se trata.

Comenté lo anterior en nuestra Peña beisbolera de Hermosillo y pronto me dijeron: “mejor pregúntale a Luis Carlos Joffroy, reciente ex coordinador de ampayers de la LMP; él debe saber en qué condición quedan los umpires cuando se retiran del activo profesional”.

Tienen razón; lo haré a la voz de ya.

Y, claro, a otros hombres de azul conocidos-amigos que toda su vida se dedicaron a esa profesión.

La falta de seguridad social-laboral de peloteros y umpires, vuelvo a reiterar, representa una latente preocupación y asignatura pendiente del beisbol profesional de México (LMP, LMB y otros circuitos menores).

Dirá alguien, cómo “friegas” con este tema; pero, la verdad, se tiene que insistir en este grave asunto laboral-social. Tanto como hoy se rechaza lo del “gasolinazo” y las condiciones económicas que se viven hoy en México por la política gubernamental que usted conoce mejor que yo.

Llamado al pelotero

Y mientras no haya respuestas/acciones sobre este asunto en la pelota profesional de México, por favor, el pelotero debe buscar la forma de proteger/asegurar su futuro de vida: pagar por su propia cuenta –de su salario-- su seguro social, ahorrar lo más que pueda en algún tipo de cuenta; invertir en determinado negocio… y así.

Amigo pelotero, amigo umpire: ya sabe usted todo lo que puede suceder si de repente enfrenta una situación –sea en el activo y peor en el retiro—si le presenta una seria lesión física o enfermedad.

Casos, ¡abundan!

Y ¿Quién les ayuda o ayudará?

Vale más prevenir que lamentar.

Y a tiempo.

El despilfarro, el desinterés; el “ya luego lo veo” y “a mí no me pasará nada porque gano muy bien”, no ayuda en nada.

Ante la falta de una asociación o un sindicato de peloteros –en la pelota nacional-- ¿qué pelotero protege su futuro?