Tal como esta programada, la celebración oficial del Día del Trabajo tuvo dos versiones.
En la primera de ellas, los dirigentes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) organizaron un mitin en el exterior del nuevo edificio de la organización, ubicado al oriente de la calle No Reelección, colonia Lindavista.
Desde las 9:00 de la mañana empezó la ceremonia donde hicieron uso de la palabra funcionarios y líderes sindicales para resaltar el significado de la fecha y reiterar la importancia que tiene esta central obrera en el juego politico del sistema priista
Además de los prinicipales líderes de la CTM estuvieron en primera fila como invitados especiales la diputada local Kiki Díaz Brown, la senadora Anabel Acosta, el director de Itesca, Gabriel Baldenebro y otras personalidades.
Como "público" estuvieron miembros de varios sindicatos, aunque no acudieron los miles de trabajadores que se esperaba.
En resumen, la "élite" de las organizaciones obreras quiso demostrar que a la hora de tomar las decisiones que vienen por el año electoral 2018, es una fuerza por sí misma, "se cuece aparte" del resto de sindicatos oficialistas.
La otra cara del festejo oficial fue el desfile de trabajadores sindicalizados, principalmente del Ayuntamiento de Cajeme, y cuyo contingente fue encabezado por el alcalde Faustino Félix Chávez y funcionarios de su administración así como la dirigencia del Sutsac y la regidora Ramoncita Flores.
Durante el paso del desfile frente a Palacio Municipal, donde ya se encontraba el Alcalde que saludaba a los contignentes desde el balcón principal, apareció un pequeño grupo de maestros disidentes afiliados a la CNTE y quienes corearon protestas y demandas laborales.
Poco vistoso y sin nada extraordinario, el desfile del Primero de Mayo concluyó para dar paso a una ceremonia, también rutinaria podría decirse, donde se entregaron reconocimientos a trabajadores del Ayuntamiento.